El músico Charly García está detenido una alcaidía de la policía, en Ecuador, donde deberá pasar dos días en prisión después de protagonizar serios incidentes durante su actuación en un recital que ofreció en Quito, en el que también se presentaron Gustavo Cerati, Fito Páez y el grupo colombiano Aterciopelados.
Charly García terminó en prisión después del concierto que se realizó anteanoche en el coliseo quiteño General Rumiñahui, durante siete horas. Cuando fue el turno de su show, el músico salió al escenario, cantó dos canciones, lanzó al piso la guitarra y varios amplificadores de sonido y no volvió a cantar más.
El arresto fue ordenado por el titular de la Intendencia de policía de la ciudad de Quito, Víctor Hugo Olmedo. El jefe de la policía quiteña indicó que, sobre la base del artículo 606 numeral 17 del código penal ecuatoriano -relativo a espectáculos públicos- se le impuso Charly García una pena de dos días de prisión en el Centro de Detención Provisional de la capital ecuatoriana.
Olmedo destacó que la sanción regirá sin perjuicio de que García asuma el pago de los daños y perjuicios ocasionados al público, a los organizadores del concierto, y a los dueños de los equipos que destrozó.
Descontrolado
"Al comienzo de su presentación causó incidentes en el coliseo, presentándose en estado etílico y bajo efectos de sustancias psicotrópicas. Sin poder tener el control sobre sí mismo comenzó a arrojar los micrófonos y a lanzar los equipos de amplificación que estaban instalados para el concierto", dijo Olmedo.
García salió al escenario, cantó dos canciones, lanzó al piso la guitarra y varios amplificadores de sonido y no volvió a cantar más.
Una hora más tarde, luego de que los espectadores lanzaron botellas de vidrio y las sillas al escenario, la policía empezó a desalojar el coliseo y el concierto terminó.
El policía agregó que esa actitud "causó un serio malestar en los espectadores y tuvo que intervenir la policía no sólo para calmar los ánimos del artista sino del público que se hallaba enardecido frente a la actitud de este ciudadano".
El recital, que duró siete horas y culminó en la madrugada de ayer, fue organizado en homenaje al rock en español.
Olmedo indicó que en la mañana de ayer García compareció a una audiencia para exponer sus argumentos sobre la accidentada presentación, pero resaltó que los alegatos del artista "no convencieron a la policía", y denunció que aún en esos momentos García "se encontraba bajo los efectos de alguna sustancia y no estaba en sus cabales".
"El cantante ha manifestado que su actitud es parte de su show, que él normalmente actúa de esa manera. Yo respeto mucho el estilo del artista, pero en cualquiera de esos casos no puede transgredir las leyes nacionales y peor aún ocasionar el escándalo y destrozos que él a ocasionado", dijo Olmedo.
Por su parte, los organizadores del evento, la empresa colombiana Show Time, no dio explicaciones sobre la suspensión del concierto de García, según informaron agencias internacionales.
El megaevento, al que asistieron unas 10 mil personas, casi la mitad del coliseo Rumiñahui, se abrió con la participación del grupo ecuatoriano Crucks en Karnak.
En segundo lugar fue el grupo colombiano Aterciopelados que durante más de una hora entonó los éxitos desde hace una década cuando inició su carrera como grupo de rock alternativo.
Tras una pausa de casi media hora, el ex vocalista de Soda Stereo, Gustavo Cerati, cantó temas de su último disco.
Cerca de la medianoche, ingresó al escenario Fito Páez quien hizo vibrar al público que coreó sus canciones más conocidas como "Circo Beat" y "Mariposa Technicolor". (DyN y Télam)
La Ciudad
