Las exportaciones de carne llegarían en el año 2003 a las 350 mil toneladas res con hueso, por un valor de 475 millones de dólares. Estas cifras, que incluyen la posibilidad de que se reabran los mercados del Nafta hacia el segundo semestre, implicarán una suba del 16,7% en volumen y 15,6% en valor, respecto de este año.
Así lo aseguró el último informe mensual de Ciccra, que estima que el 2002 cerrará con exportaciones de carnes vacunas (excluidas las menudencias) de 300 mil toneladas res con hueso, por un valor de 400 millones de dólares.
"De esta manera, en comparación la pobre performance de 2001, los volúmenes arrojarán una suba de 102,6% y los valores de 94,9%, con un retroceso en el precio promedio por tonelada exportada del 3,8%, señala el trabajo.
Los analistas de la entidad se mostraron esperanzados de que lleguen a buen puerto las negociaciones para reabrir los mercados de Estados Unidos, Canadá y México antes del año 2004.
En ese sentido, recordaron que Estados Unidos y Canadá significaron 27% del volumen y 22% del valor total exportado en 2002. "En realidad, si se toma el período enero-julio de ese año, es decir previo al cierre por resurgimiento de aftosa que se produjo en agosto, la importancia de los volúmenes exportados al Nafta era de 35,5% sobre el total", aclaran.
En Ciccra confían que, dado el cambio de gobierno en México, "en esta oportunidad también se logre la reapertura de ese mercado, que consume 23,1 kilogramos por habitante por año e importa 426 mil toneladas anuales.
Estas buenas noticias se sumarían a la reapertura del mercado chileno, por ahora restringido a una veintena de frigoríficos. En el 99, Argentina exportó 75 millones de dólares y "la importancia que para la Argentina implica este mercado radica en el monto de ventas anuales y también en que es un destino alternativo para los cortes del delantero, brindando de esta manera la posibilidad de obtener mejores precios que los obtenidos en destinos del circuito aftósico".
Los analistas de Ciccra subrayan que las exportaciones del 2003 podrían elevarse a 367 mil toneladas y 525 millones de dólares si finalmente la Unión Europea efectiviza la ampliación de la cuota Hilton en 10 mil toneladas. "Si este fuera el caso, entonces los volúmenes exportados mostrarían una expansión de 22,4% y la facturación resultaría 27,8% superior a la de 2002, con lo cual el precio promedio arrojaría una mejora de 4,4%.
Respecto de la cuota Hilton, el informe señala que las ventas se están realizando "de manera fluida y con un importante aumento del precio promedio respecto de las ventas del primer semestre". Entre julio y diciembre ya se exportaron 20.476 toneladas correspondientes al período 2002/2003, por un valor de 96 millones de dólares.
El precio promedio se ubicó en 4.688 dólares por tonelada peso producto, ubicándose 32,5% por encima del promedio registrado en la primera parte de 2002, período en que se concentraron todos los envíos de la cuota 2001/2002, a partir de la rehabilitación de las exportaciones en febrero pasado.
Cayó el consumo
Los analistas de Ciccra advierten que el aumento de las exportaciones se produjo sin que hayan variado los volúmenes de producción de carne. Extraen como conclusión la clara disminución del consumo interno.
"En comparación con 2001, la retracción del consumo interno fue de casi 4 kilos por habitante por año, estos valores ratifican la pérdida del poder adquisitivo del salario luego de la devaluación", señalan, aunque aclaran que "si tenemos en cuenta que el precio de la vaca aumentó más que el resto de las categorías y por encima del precio del dólar, se ve que la demanda reorientó en parte su consumo hacia cortes de menor calidad y precio". De no haber ocurrido esto, destacan, el consumo per cápita debería haber caído de manera más significativa.
Según los datos estimados por la Oncca, la faena promedio mensual en los primeros diez meses de 2002 se ubicó en 939.338 cabezas, quedando 2,7% por debajo del promedio mensual observado en enero-octubre de 2001.
En el acumulado de enero-octubre de 2002 se faenaron 9.393.376 cabezas de ganado vacuno, lo que significó una merma de 3,1% respecto a enero-octubre de 2001. En el caso de los volúmenes de carnes producidos el sector acumuló una expansión de sólo 0,2% en el período analizado. La mejora del peso promedio de la hacienda faenada fue la que permitió sostener el volumen de carne procesada en un contexto de retracción de la faena.
"Si tomamos el período diciembre 2001-octubre 2002 (desde la devaluación del peso argentino), los precios al consumidor de carne vacuna acumularon un crecimiento de 78,9%, destacándose menudencias y achuras, que duplicaron sus precios. El precio de los cortes traseros tuvo un crecimiento de 79% y el de los cortes delanteros una suba de 79,1%", señala el informe, que destaca que "en el período analizado el precio en pesos del kilogramo vivo de novillo se triplicó". El precio en dólares, en cambio, acumuló una baja de 14,7%.