cartas

Inmaduro accionar

Como alumno regular del Colegio Sagrado Corazón siento la necesidad y la obligación de opinar e informar sobre los hechos acontecidos el pasado 27 de noviembre. Ante todo y a todos pido públicamente disculpas, y muy en especial a aquellos que se vieron afectados directamente por nuestro inmaduro accionar. Es costumbre, desde hace algunos años, realizar la "típica caminata" al finalizar el ciclo lectivo, recorriendo diversas instituciones educativas (consideradas "competencia") y realizar en su fachada cánticos, abucheos y, en alguna que otra ocasión, pintadas sobre su frente. Alguien se estará preguntando ¿y vos...qué hiciste? Sí, yo participé en la caminata, pero pacíficamente y sin tratar en lo más mínimo de evadir culpas, soy tan responsable como aquellos que se apropiaron "orgullosamente" de los desmanes. Como alternativa, sugerí para los próximos años, al cierre de cada acto lectivo, realizar una cena o encuentro entre los alumnos y sus familias en las instalaciones del colegio, por supuesto, contando con la colaboración de profesores y autoridades. Tamaña fue mi sorpresa cuando ante tal petitorio, una docente me respondió "no vengas con eso ahora, háganse cargo de sus actos, ¿o quieren destrozar el colegio también?". Nada es más indiscutible que cada ser humano es total y absolutamente responsable de sus actos, y desde el comienzo de esta misiva resalto mi autocrítica, pero considero que en un país en donde los jóvenes de hoy son las promesas del futuro, necesitamos modelos, respuestas y argumentos valederos... no el sí porque sí, o el no porque no. Gracias a Dios, mi familia me lo da. Finalmente, quiero pedirles especialmente disculpas a aquella señora que junto a su hijita y a toda su familia padecieron los inconvenientes aparejados en la última "caminata" y si bien sé que algunos no son posibles de subsanar, mi entera y mayor solidaridad para los que así lo requieran.
DNI 32.801.965