La Unión Europea presentó ayer ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) una oferta de reducción del 45 por ciento de los subsidios agrícolas como parte de la negociación multilateral de la ronda Doha, que busca establecer nuevas reglas al intercambio de bienes y servicios a nivel internacional.
La propuesta de la UE incluye una reducción del 55 por ciento de las ayudas internas que prestan los estados del primer mundo a sus productores agrícolas, y rebajas del 36 por ciento en los aranceles para ese tipo de producción primaria.
La iniciativa del Grupo de los 15 fue elevada ante la OMC por los comisarios de Agricultura, Franz Fischler, y de Comercio, Pascal Lamy.
Sin embargo, la UE pide al resto de los países de la OMC que acepten su sistemas de certificaciones de calidad y de normas de origen, elementos que son polémicos, y que en muchos casos son considerados como verdaderas trabas paraarancelarias.
Varios requisitos de esa normativa son adversos a la entrada de productos argentinos al mercado europeo, como el caso de la obligación de imponer etiquetas especiales para alimentos en base a organismos genéticamente modificados.
Políticas para países pobres
El programa presentado por los europeos además contiene políticas específicas para "mejorar la posición de los países en vías de desarrollo", como por ejemplo una "franquicia de derechos" y el final de los topes para "cualquier exportación agrícola de los países más pobres".\Fischler aclaró que las reducciones a los subsidios estarían condicionadas a que "la carga sea compartida en forma equitativa". De acuerdo con el cronograma fijado para las negociaciones multilaterales, el capítulo agrícola debería comenzar a discutirse a partir de marzo del año próximo.