Rechazo

La sanción de la ley de uniones civiles generó un total rechazo por parte de la Iglesia Católica, que aseguró ayer a través de distintas organizaciones laicales que la normativa no busca equiparar a las parejas homosexuales con las heterosexuales, sino "privilegiarlas".
Los representantes eclesiásticos advirtieron, asimismo, que la aprobación del proyecto elaborado por la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) no hace más que "abrir el camino para autorizar las adopciones a dos personas de un mismo sexo".
La Comisión Arquidiocesana de la Mujer expresó su disconformidad con la iniciativa al considerar que "vulnera el derecho natural desde su base pues tiende a la destrucción de la persona, de la familia y en definitiva de la sociedad y, en consecuencia, tergiversa el orden natural".
Por su parte, la Rueda de Enlace de ONG's, que se ocupa de cuestiones éticas y de defensa de la vida por nacer, opinó que "no existe razón alguna para proteger de modo especial la unión de homosexuales" y reiteró que la ley "no busca equiparar a las parejas homosexuales con las heterosexuales, sino privilegiarlas".
El nucleamiento laical consideró que "darle beneficios sociales a las parejas homosexuales es injustamente discriminatorio para con otros convivientes que no lo sean", y citó el caso de dos maestras jubiladas que viven juntas y no son lesbianas que, a diferencias de dos mujeres que sí lo son, no se les facilitará el acceso a la vivienda.