"Es un acto delictivo". Contundente, la decana de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Raquel Chiara, calificó el escrache que una veintena de estudiantes realizó ayer en la puerta de su domicilio particular en protesta a los cambios que las autoridades de la casa de estudios y la UNR quieren realizar en el sistema de ingreso. Es más, la titular de Medicina aseguró que "no sólo es una actitud desubicada, sino que además unos 30 chicos no representan a la cantidad de alumnos que tiene una de las facultades más grandes de la Universidad".
Desde hace tiempo y con la aprobación del Consejo Superior, la Facultad de Medicina incorporó al sistema de ingreso la Instancia de Confrontación Vocacional (ICV), una articulación con la escuela secundaria que permite generar cierto nivel entre los ingresantes, pero no limita el ingreso. Pero semanas atrás tanto las autoridades de la facultad como el propio rector de la UNR, Ricardo Suárez, plantearon la necesidad de modificar el sistema de ingreso a Medicina porque -según planteó Chiara- "es imposible que entren todos los aspirantes a la carrera".
A la cabeza de la movilización realizada ayer, al igual que durante la toma del ex Sanatorio Rawson, estaba el presidente del Centro de Estudiantes de Humanidades y Artes, Denis Vilardo.
"En esta primera instancia de evaluación ya quedaron afuera casi dos mil chicos. Y ahora plantean que no hacen falta médicos, cuando en los barrios hay chicos mal alimentados que necesitan atención", se quejó Vilardo.
La entrada del edificio de Urquiza al 800 fue empapelada con carteles que decían: "En un país donde la gente se muere por falta de atención médica, ella deja afuera de la facultad a más de dos mil estudiantes" y el "no al ingreso restricto" quedó estampado en las paredes de la cuadra.
En el grupo que protagonizó el escrache sólo había tres ingresantes a Medicina, pero no ahorraron quejas. Es más, adelantaron que estarán el martes próximo en una de las últimas reuniones del Consejo Superior para plantear sus reclamos.
"Queremos que el ingreso sea irrestricto. Pero si van a imponernos un examen eliminatorio, que lo hagan en forma transparente y que antes nos aseguren un cursillo de ingreso como es debido", protestó Marcelo Dayer, uno de los aspirantes a ingresar a la facultad.
Los estudiantes plantearán en la próxima reunión del Consejo Superior de la Universidad "la anulación de todas las instancias realizadas hasta el momento", así como la puesta en marcha de "un curso de ingreso intensivo y práctico".
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La Ciudad
