El representante de la comunidad en el Hospital Centenario, Ariel Pérez, advirtió que desde el mes pasado se dejaron de entregar 1.044 kilos de leche fortificada a sectores en riesgo de desnutrición como ancianos, desdentados, indigentes, tuberculosos, discapacitados y pacientes con HIV. "Se han endurecido tanto las normas que ahora -pese a que se ha reforzado la partida- sólo se destina a niños de 0 a 5 años de edad que se encuentren malnutridos", explicó el funcionario.
Si bien no están debidamente identificados, conforman una parte importante de la población sanitaria que concurre al Centenario a demandar atención médica y asistencia social.
"Al hospital llegan diariamente ancianos que viven solos o están desdentados, para los cuales la única dieta diaria son tres o cuatro tazas de leche", comenzó a especificar Pérez.
A esta lista se agregan tuberculosos que deben tomar ocho comprimidos diarios de medicación y necesitan la leche fortificada para prevenir trastornos estomacales. Otro sector lo conforman los discapacitados, indigentes y pacientes con HIV, los cuales "también necesitan varias tomas diarias de remedios y padecen úlceras", recalcó Pérez.
Esta demanda hacia el Centenario representaba una partida especial mensual de más de mil kilogramos de leche que ahora se ha suprimido debido "a la rigidez con que se han aplicado las normas, que no contemplan la entrega de raciones a estos casos específicos", justificó el funcionario del centro asistencial.
En rigor, el Ministerio de Salud santafesino ha anunciado un refuerzo en las raciones de leche fortificada, llegando incluso a su duplicación para la zona del sur provincial.
"No correspondía hacer efectiva la entrega, pero se hacía por fuerza mayor porque el sistema lo permitía", narró Pérez. Ahora se ha establecido que los beneficiarios son exclusivamente madres embarazadas y bebés malnutridos.
Reclamo a Promoción Comunitaria
Debido a ello, las autoridades del Centenario han mantenido reuniones con la secretaría de Promoción Comunitaria para lograr que sean absorbidos por la repartición, pero hasta ahora no se registraron resultados.
Por último, se denunció una cantidad de casos que Salud detecta, medica y controla a través de un seguimiento. "En esta situación el Centenario atiende a unos 36 niños desnutridos de segunda categoría -identificados en el área programática- que no superan su patología, una de las razones es que la madre usa la leche fortificada para todos los integrantes de la familia. Es en estos casos donde debería comenzar el trabajo de Promoción Comunitaria", se quejó Pérez.
A partir de el año en curso, el área programática encargada de administrar y distribuir las partidas de leche depende exclusivamente de la zona 8 de salud.
De todos modos, la directora del centro asistencial, Claudia Perouch, reconoció que muchos profesionales que se desempeñan en atención primaria han reclamado mayor flexibilidad a la norma emanada del Ministerio de Salud de la Nación.
Al mismo tiempo, la directora del Centenario aclaró que por el momento se está cubriendo esta necesidad con un remanente de leche fortificada que envió la cartera sanitaria santafesina. De igual modo, Perouch mostró su preocupación en relación a algunos puntos de las directivas que bajó la Nación.
"Ahora se entrega a partir de los seis meses y hasta los dos años de edad, cuando antes no había límites de edad para pacientes con estado de desnutrición", especificó.