Tres ejemplares pura sangres de carrera que llegaron hace días desde la localidad cordobesa de Río Cuarto, se encuentran afectados de anemia, y las autoridades palermitanas, alertados por los veterinarios, decidieron separarlos de los boxes de tránsito donde se hallaban alojados, para aislarlos en un sector de la antigua veterinaria. Los tres animales -de quienes no se suministraron datos oficiales-, fueron estudiados por los veterinarios de Palermo, quienes radicaron las correspondientes denuncias en el Senasa, enviando muestras de sangre para redondear y corroborar la infección.
Si bien las autoridades del hipódromo no proporcionaron los datos filiatorios, ni tampoco el stud y el profesional que los atiende, se pudo saber extraoficialmete que corresponden a una misma caballeriza, y que estarían a cargo -provisoriamente- del entrenador Juan Fernández. El aislamiento de los caballos infectados se hizo a manera de precaución, porque la enfermedad no es un virus que se halla en el aire, y sólo se puede propagar por contacto directo de transmisión.
Al detectar esta enfermedad se logró prevenir algún contagio futuro, y en ningún momento se pensó en parar la actividad hípica dentro del metropolitano, donde existe un control veterinario permanente de todos los caballos que transitan su predio. (Télam)
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La Ciudad
