Aunque reconoce una "leve mejoría" en los niveles de empleo, el intendente Hermes Binner sigue siendo cauteloso: "La gente todavía no siente esa mejoría porque la situación de empleo sigue siendo gravísima", dijo ayer a La Capital durante una recorrida por la Escuela Normal Nº2 (Balcarce y Córdoba), donde visitó el restaurado mural de Alfredo Guido.
El intendente también se refirió a la situación que atraviesan muchas familias tucumanas, donde la desnutrición ya se cobró varias víctimas. "Son escenas lamentables, pero en Rosario la situación es diferente. Hay pobreza, pero las necesidades básicas, como la alimentación, están cubiertas".
Esta semana el secretario de Trabajo de la provincia, Oscar Ercoli, no sólo aseguró que hay en Rosario un incipiente aumento de la cantidad de puestos de trabajo, sino que además anunció que estos avances se van a ver reflejados en una baja de los índices de desempleo de los próximos resultados de la Encuesta Permanente de Hogares que realiza el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Pero en este sentido, el intendente se mostró más cauteloso: "Es una leve mejoría. Ahora la única solución es que abran y crezcan las empresas, porque son las que van a poder generar las fuentes de trabajo que la gente está demandando".
Además, insistió con que la situación del desempleo sigue siendo "grave" y aclaró: "No nos podemos confiar del hecho de que 60 mil familias rosarinas reciben 150 lecops por mes, porque eso no les alcanza para vivir dignamente y está lejos de representar un sueldo digno".
Hay que esperar
Es que para Binner el veranito económico por el que atraviesa el país tiene que ver con "un momento particular", por lo que cree que hay que esperar para ver cómo avanza la situación.
"Este mejoramiento -afirmó el intendente- está relacionado con que los precios diferenciales de los cereales, sumados a una cosecha extraordinaria, permitieron que la balanza comercial de la Argentina tenga un superávit de entre 1.300 y 1.500 millones de dólares. El que sembró a un dólar un peso, cosechó con un dólar que valía 3,60 pesos".
Es por eso que para el intendente aún no hay una verdadera reactivación que mejore las condiciones de vida de las clases más necesitadas, sino que "el leve aumento del consumo se da por la buena campaña agrícola" que se dio este año.
Lejos de ser Tucumán
"En Rosario hay pobreza, pero la alimentación está cubierta y no llegamos a la situación de Tucumán", aseguró Binner, quien no se ahorró críticas: "Es lamentable que en un país que exporta alimentos a la mayoría de las naciones del mundo tengamos que ver las escenas de desnutrición que venimos recibiendo desde Tucumán".
Pero también aclaró que "hay una gran diferencia entre esa provincia del norte y nuestra ciudad, porque aquí hay una complementación de las redes de salud de la provincia y la Municipalidad, además de una gran integración de la sociedad civil".