Matan a un enfermero en medio de una orgía

Lo hallaron estrangulado en el barrio porteño de Parque Patricios. Creen que murió en un rito sadomasoquista

Buenos Aires.- Un enfermero de 65 años apareció ayer muerto en su vivienda del barrio porteño de Parque de los Patricios, con signos de haber sido estrangulado durante una orgía, informaron fuentes policiales.
La víctima fue identificada como Quiterio Romero, un paraguayo naturalizado argentino de 65 años que trabajaba de enfermero en la guardia del Hospital Muñiz.
A raíz de las primeras declaraciones de testigos, los investigadores creen que Romero pudo haber muerto en alguna clase de "rito sexual sadomasoquista".
El hallazgo se produjo en su domicilio de la calle Uspallata 2642, el departamento 7 ubicado al fondo de un PH (propiedad horizontal) donde vivía solo. Policías de la comisaría 28ª llegaron al lugar en las primeras horas de ayer alertados por los propios vecinos del enfermero que se quejaban por el volumen de la música que salía de la vivienda.
Romero fue encontrado atado a su cama, vestido sólo con un slip y con "unas marcas puntuales en el cuello que hicieron presumir que fue estrangulado con las manos", según confió un investigador policial.
Dos fuentes del caso aseguraron que Romero "sería bisexual", aunque los testigos le dijeron a la policía que antenoche "estuvo acompañado por dos señoritas".
En la casa, expertos en rastros de la Policía Científica recolectaron una serie de elementos para tomar huellas, entre ellos, vasos, botellas de bebidas alcohólicas y cabellos que serán peritados.
Los investigadores de la Policía Federal intentaban reconstruir con los vecinos y con sus compañeros del Hospital Muñiz, las últimas horas de Romero, quien ayer trabajó en la guardia y fue visto ingresar al PH con las mujeres.
Incluso, en el mismo edificio, a tres puertas de distancia, viven dos compañeras de la guardia médica del Hospital Muñiz que fueron interrogadas.
La hipótesis más firme, según las fuentes, es que "quizás por accidente", las acompañantes de Romero se excedieron en alguna clase de "violento juego sexual y terminaron estrangulándolo". Pero los investigadores no descartaron un crimen pasional o una venganza.
Las puerta de la casa de Romero no presentaba signos de haber sido violentada y en el interior de la vivienda se encontraron electrodomésticos y otros objetos de valor que en principio harían descartar la posibilidad de un robo seguido de muerte.
Pero tampoco esa hipótesis puede ser desechada por completo porque, según uno de los voceros consultados, el lugar presentaba un aspecto de "desorden ordenado, como si hubieran buscado algo en particular". (Télam)