El vocero del Fondo Monetario Internacional, Thomas Dawson, aclaró ayer que el organismo observará que se pongan en práctica las medidas acordadas entre el gobierno y los gobernadores, antes de firmar un acuerdo con argentina. En ese sentido, coincidió con el ministro de Economía, Roberto Lavagna, quien aseguró que el consenso político alcanzado con los mandatarios provinciales y los legisladores "es una condición necesaria pero no suficiente" para cerrar la negociación. Desde Washington, el portavoz del Fondo sumó otro escollo. Dijo que el incumplimiento del pago con el Banco Mundial torna "más compleja" la situación.
"La implementación de las medidas acordadas va a ser esencial para el apoyo del programa" destinado a refinanciar unos 15.000 millones de dólares hasta el 2003, destacó Dawson, quien agregó: "El programa requiere acción por parte del gobierno argentino".
Mientras Dawson formulaba esto, Lavagna, en declaraciones a la prensa extranjera, aseguraba que "la aprobación por parte del Congreso de estas medidas, es una condición necesaria pero no suficiente para alcanzar un acuerdo con el FMI".
"El consenso político es importante porque por primera vez incluye medidas efectivas", destacó el ministro.
Sin embargo, advirtió que las diferencias por los aumentos de tarifas de los servicios públicos y el freno al retiro de fondos del corralito financiero figuran entre los asuntos pendientes para llegar a un acuerdo con el organismo, tras diez meses de negociaciones.
Para dejar sentado que continúa sin fecha un posible acuerdo, Lavagna destacó que "por ahora no hay ninguna misión del Fondo que viaje a la Argentina".
En el mismo sentido, Dawson destacó que "sigue siendo necesario hacer progresos, hay bastante trabajo para hacer".
Lavagna adelantó que la semana próxima viajará a Europa aunque se excusó de precisar los motivos de esa visita. Se especula que en la gira tomará contacto con los directivos de las empresas de servicios con casa central en el viejo continente.
"La semana que viene viajo a Europa pero no puedo informar nada sobre la agenda", dijo el ministro.
En tanto, el gobierno sufrió un nuevo revés al rechazar la Corte Suprema un pedido de per saltum para que decida sobre el fallo del juez marplatense, Alfredo López, que habilita a 14 mil ahorristas de la ciudad balnearia a retirar sus fondos atrapados en el corralito vía amparos.
Dawson se manifestó sobre el acuerdo del lunes y aseguró que "conseguir ese consenso es responsabilidad de las autoridades" argentinas, mientras que el Fondo "necesita que el programa sea sostenible".
"La implementación de las medidas ha sido una preocupación nuestra durante algún tiempo en Argentina", insistió Dawson, luego de recordar que muchos de los objetivos acordados en abril por los gobernadores nunca se cumplieron.
Muchas de las medidas del plan de estabilización planteado esta semana entre la Nación, los gobernadores y el Congreso ya figuraban en el plan de 14 puntos acordados entre el gobierno y las provincias en abril, recordó Dawson. Además, el representante del FMI consideró que la decisión de Argentina de pagar sólo 79,2 millones de dólares en concepto de intereses de un crédito del Banco Mundial de 805 millones de dólares que vencían la semana pasada "hace que la situación sea mas compleja". Sin embargo, esa decisión "no nos impide trabajar para llegar a un acuerdo", dijo el vocero, y agregó que "estamos en contacto diario con altos funcionarios argentinos".
Atanasof no quiere excusas
Mientras Dawson y Lavagna coincidían en enfriar las expectativas respecto de un pronto acuerdo, el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, expresó su deseo de que el Fondo "no encuentre más excusas" para dilatar la firma del convenio.
El funcionario sostuvo que "no es conveniente poner fechas, y me parece importante decir que hay posibilidades de que venga a la Argentina una nueva misión del FMI", señaló.