Cinco periodistas sentados a una mesa de noticias que repasasen los títulos del día pero con una visión propia, desde Rosario, y consecuente con la que, semejante pretensión, se presenta como la nueva generación de profesionales en televisión. Con esa idea, "Medianoche" se sumó el lunes 3 de junio a la grilla de programación de Canal 5. Aunque la apuesta era más arriesgada. A diferencia de los otros programas con que el 5 rosariganasaba su grilla, "Medianoche" se planteó como el elemento que completaba la tríada informativa compuesta por los noticieros del mediodía y de la tarde. Es decir, con un envío diario. Y todos saben que no es lo mismo correr una cuadra que cinco.
Además, el proyecto se presentó como una cooperativa de hacedores, donde todos ponen trabajo y cuando hay algo que repartir, todos ganan. Ninguna novedad en la Argentina devastada por la timba, ni en Rosario donde las ganas de laburar y arriesgar por algo nuevo hacen más que quienes concentraron riquezas en la fiesta menemista. Ninguna novedad, a la vista de DIC o el ex Tigre, por ejemplo, pero sí el primer ensayo cooperativo explícito en la televisión abierta aborigen.
El desafío de la renovación
Frente al desafío de la renovación, la mesa se formó con un 2-1-2. Los experimentados Gabriel Pennise ("T vi") y Roberto Caferra ("Elemental Watson") a la izquierda de su pantalla, señora; Ariel Bulsicco por el medio marcando el ritmo de la noche; y los nóveles Juan Carlos Cagnoli y Ricardo Luque haciendo lo suyo por primera vez en TV abierta sobre la derecha. Pennise aportó equilibrio en un terreno donde la pasión es periodísticamente descalificante: el deporte. Su seriedad jugó como un buen complemento de la simpatía con aires de bufón de Luque, firme en su plan de construir, de una vez por todas, la farándula rosarina. Con aires casi misteriosos Caferra se preocupó por exprimir la información de la ciudad y de la política, asistido por un Cagnoli que esgrimió, con algunos excesos, pasos de economía teñida de cotidianidad.
Así, "Medianoche" se encastraba y se consolidaba. La costumbre y el recorte presupuestario hogareño a costa del cable hizo el resto. Entonces, las mediciones acompañaron, con 7,88 puntos, por ejemplo, en la primera semana de noviembre. Excelente marca si se compara con la de su principal competidor, "En síntesis" que en ese mismo período sumó 5,2 puntos.
Pero cuando el retoño de la nueva generación se fortalecía, la gerencia general del canal decidió que Bulsicco no continuara al frente del envío; butaca que pasó a ocupar Alejandro Grandinetti, paradójicamente, el conductor original del programa cuando todavía era un proyecto.
La pregunta del millón pasó entonces por saber si "Medianoche" ganaba o perdía con la incorporación de Grandinetti. Bulsicco es la cara más conocida y respetada de la emisora, y el conductor hasta había despuntado -con pingües resultados al calor de los insinuantes mensajes del público- el viejo anhelo de descontraerse de la estructura del noticiero. En tanto, la estrategia de los altos mandos del Canal 5 era otra: preservar al conductor, dicen, en pos de un nuevo y gran proyecto para 2003, y al mismo tiempo, conservar su línea editorial dentro de los límites de la gerencia de noticias.
Una fórmula bienintencionada
De una forma u otra, con Bulsicco o Grandinetti, "Medianoche" se acercó con esfuerzo a las cinco estrellas. Sin nombres ni bellezas logró sumar las estrellas de la audacia, por el emprendimiento; del futuro, con empleos para periodistas y técnicos; del buen humor, necesario para pegar la cara a la almohada, y las del compromiso periodístico y generacional. Luego, debió lidiar con la desordenada salida de Bulsicco mientras hacía picos de 11 puntos de rating. Pese al cambio, la producción mostró que tenía una fuerte estructura informativa, ordenada y ágil, periférica a las sillas ocupadas o no alrededor de la mesa.
En pugna por hacerse un lugar en la rutina de los rosarinos, "Medianoche" supo distender el fin de jornada y puso en el aire información de calidad con ecos de autorreferencias e informalidad que muchas veces la hicieron críptica, confundiendo al televidente con contextos quizás demasiado cercano a los hacedores del programa. En el centro de su estructura visual se destacó la concepción estética al estilo CQC, su azulina factura técnica, una ajustada dirección y una edición computarizada con atracciones eléctricas. Pero por sobre todo "Medianoche" se distinguió en su bienintencionada fórmula de información sin corbata ni estridencias, mientras afuera Rosario se va a dormir.
Ficha
Conducción: Alejandro Grandinetti, con Gabriel Pennise (deportes), Roberto Caferra (información general), Juan Carlos Cagnoli (economía) y Ricardo Luque (espectáculos).
Producción: Eventos Producciones.
Lunes a viernes, a las 24, por Canal 5.
Calificación: cuatro estrellas.
La Ciudad
