La conducción del PS dejó entrever ayer que la responsabilidad de una eventual ruptura con el ARI es de su líder, la diputada Elisa Carrió: "Si alguien quiebra la fuerza, no será el socialismo". Sin embargo, aún no hay una resolución de fondo. Los dirigentes, encabezados por el titular del PS, el diputado Alfredo Bravo, analizaron en la sede partidaria porteña las declaraciones realizadas por la candidata presidencial del ARI, quien dio por hecho el cisma. El secretario adjunto del PS, el diputado Oscar González, dijo que "si alguien quiebra la fuerza, no será el socialismo", y destacó que "no hay espíritu de ruptura sino de construir un polo de centroizquierda". González opinó que las palabras de Carrió "están suscitadas por un fastidio de naturaleza personal" y llamó al ARI "a la cordura, la sensatez y a la responsabilidad política". A su turno, el intendente de Rosario, Hermes Binner, optó por ponerle paños fríos a la caldeada discusión que amenaza con disolver la sociedad política entre el ARI y el PS. "No creo que (la alianza) esté rota", afirmó Binner, quien negó haber escuchado los dichos de Carrió. Acerca de si la diputada decidió bajarle el pulgar al vínculo con el PS, consideró: "Las puertas se cierran y se abren". "La situación del país demanda una fuerza amplia, pluralista, con contenidos claros y una propuesta alternativa al neoliberalismo para consolidar el desarrollo económico nacional y un fuerte compromiso social", enfatizó el intendente en declaraciones realizadas en la sede de la Gobernación. Luego de aclarar que la posición del PS "es de diálogo", aprovechó para ratificar el respaldo a la candidatura de Carrió y reiterar que "nunca planteamos la vicepresidencia para el socialismo, aunque sí sería bueno que nos enteremos del nombre antes de que tenga trascendencia pública". Sobre el faltazo de la dirigencia del PS, y el suyo en particular, al acto de proclamación de la postulación de Lilita, Binner explicó: "Yo entendí, incluso cuando estuve con ella (la semana pasada), que se trataba de la presentación de su partido y que, así como la unidad del PS tuvo su momento, también lo habría para el ARI". Por su parte, el diputado socialista Héctor Polino aseveró que en una fuerza "plural" se necesita "una mayor dosis de tolerancia para mantener la convivencia". Su par arista Graciela Ocaña reconoció que hay "un deterioro importante" en la relación con el PS, pero estimó que las dificultades pueden ser superadas con "ideas y reglas claras".
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