Un álbum que no sorprende

Después de sortear las pruebas de canto y de baile y de vivir momentos emotivos hasta desembocar en el triunfo, Manu, Tripa, Gero, Milton y Pablo acariciaron el sueño de grabar "Mambrú", su primer disco, que fue editado por el sello BMG.
La placa contiene 11 tracks y comienza con "A veces", el corte de difusión que, como todos los temas del CD, mezcla recursos sonoros en boga con letras previsibles. Luego se suceden "Salta", en cuyo estribillo la palabra suena como "solta" en las voces argentinas que mienten un acento extranjero; "Una mirada", una balada lisa y cuyo estribillo recuerda sonidos de "Sea", el último disco de Jorge Drexler; "Tiene que cambiar", tema que mezcla rap y funk, y "Yo me muero por ti", una linda balada con una buena primera voz y un coro que intenta la combinación de timbres.
El disco también incluye "Tu amor", otro tema que coquetea con el funk y con el rap; "Una vez más" y "Me quema", con guitarras que remiten al Pink Floyd de "The Wall" y voces distorsionadas. La placa cierra con "Buscar un amor", "Voy" y "Cambiar el mundo".
Los compositores de los todos los temas fueron Afo Verde, Pablo Durand y Fernando López Rossi, tres profesionales que saben lo que quieren. Aunque su música se acerque mucho a los jingles de productos de consumo masivo para adolescentes, hay que reconocer que para haberlo hecho en diez días el disco no está mal. Sin embargo, está a años luz de lo que puede considerarse "una obra grabada" y no es más que el premio con el que soñaron los cinco nuevos "Popstars".