Villa Cañás. - A las múltiples roturas de techos, vidrios, árboles, autos particulares y cortes en el suministro de energía y de agua que originó la intensa pedrea del viernes pasado y las primeras horas de ayer deben sumarse las cuantiosas pérdidas en los cultivos.
De acuerdo a lo manifestado por productores agropecuarios de esta ciudad las zonas más afectadas serían las comprendidas por las localidades de Alberdi, San Gregorio y pueblos aledaños, además de las denominadas zonas de El Cisne y La Pantanosa, ubicadas al sur de Villa Cañás y tomando una franja de Teodelina y Arribeños.
En otros sectores, como el ubicado en las inmediaciones de la Estancia Díaz y campo Chapino, ha sido muy castigado el trigo, pero no así el maíz y la soja, "las pérdidas son parciales porque el maíz está deshilachado, la piedra sólo le rompió las hojas y pero puede recuperarse", indicaron los productores agropecuarios a La Capital.
En las primeras horas de la mañana el intendente de Villa Cañás, Alberto Romagnoli, hizo referencia a la situación que afectó a toda la región. "La tormenta se fue dividiendo en distintas tandas, tomando Teodelina, Melincué, Elortondo en un primer momento y continuando por Alberdi, Christophersen, San Gregorio y por último nos tocó a nosotros. A nivel de la cosecha habrá que hacer una evaluación más pormenorizada, pero evidentemente en algunos sectores pulverizó todo", dijo el intendente.
En su mensaje de tranquilidad a la población el funcionario dijo que no fue necesario evacuar a vecinos, pero que los daños materiales son de consideración, teniendo como epicentro la zona del Plan Vea, donde se ha notado la mayor cantidad de árboles caídos con las consecuencias lógicas que implican los cortes de cables.
La furia con que se desató el viento en la noche del viernes provocó la caída de un silo de acopio de la firma Borras SA y la rotura de vidrios y chapas en la Escuela Nº 484. "En busca de brindar tranquilidad a la población personal de bomberos voluntarios junto a defensa civil comenzó a accionar ni bien terminó la pedrea hasta altas horas de la madrugada y lo seguirá haciendo hasta que sea necesario", acotó Romagnoli.
Melincué
Con la situación más controlada, pero sumamente preocupados por el avance de las aguas, Enrique Ascaini, subjefe del cuerpo activo de bomberos voluntarios de Melincué, indicó a este diario que el cruce sur de entrada a Melincué tenía 70 centímetros de agua, encontrándose también anegadas las calles de tierra. "El problema del agua es cada vez peor, porque a nosotros nos ingresa desde la laguna y de los campos vecinos, cada vez se agrava más nuestra situación y hemos pedido colaboración a Defensa Civil de la provincia", dijo Ascaini.
"El fuerte viento provoca que el agua de la laguna pase arriba de la ruta. Nosotros tratamos de detener el tránsito, aunque algunos pasan igual, pero estimo que en cualquier momento va a ser imposible circular", señaló el bombero. En la jornada del viernes el mayor inconveniente lo generó la piedra "había prácticamente 20 centímetros en todo el pueblo y las afueras", afirmó Ascaini, indicando que aproximadamente 12 familias se autoevacuaron.