El índice de precios al consumidor (IPC) de octubre registró una suba del 0,2%, el nivel más bajo del año y una cifra que se ubica a la altura de la evolución que registraba este indicador antes de la devaluación. Los alimentos influyeron en esta tendencia, ya que dentro de los rubros generales mostraron un comportamiento deflacionario que alcanzó el -0,3%. Por caso, productos como aceite y harina, que pegaron un fuerte repunte tras el abandono de la convertibilidad, se ubicaron el mes pasado en el segmento de los que más bajaron, dando muestras de un leve reacomodamiento en los valores de los productos que más consume la gente.
Los datos fueron suministrados ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) y resultaron inferiores a las estimaciones que manejaban analistas del sector público y privado, que daban cuenta de una inflación del 0,8%. Los empresarios locales del rubro alimentación se mostraron escépticos sobre el mantenimiento de esta tendencia y apuntaron que si bien se produjeron bajas significativas durante octubre, en la primera semana de noviembre hubo repuntes similares a las caídas producidas el mes anterior (ver aparte).
En consecuencia, "el consumo se modificó", explicaron los empresarios e hicieron referencia a una marcada inclinación hacia segundas marcas, como sustitutos de los productos tradicionales, para atemperar el efecto de los precios sobre el bolsillo.
El organismo precisó además que el indicador acumula en lo que va del año un incremento del 40%, mientras que el índice de precios mayoristas tuvo un aumento del 0,9%.
La escasa variación de los precios se debió a la deflación que se verificó en el rubro alimentos y bebidas (-0,3%), lo cual a su vez provocó que la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que mide la línea de pobreza en Capital Federal y Gran Buenos Aires, disminuyera el 1,1%.
Este último dato alteró la secuencia de incrementos que se venía dando hasta el momento, ya que desde enero las subas de la CBA duplicaban a la del IPC.
Dólar y ofertas
Graciela Bevacqua, directora de Indices de Precios de Consumo, explicó que las mayores caídas de precios se verificaron en carnes rojas, harinas, aceites y verduras, artículos que a lo largo del año acumulan incrementos de entre el 50 y el 200%. "Esto tiene que ver con motivos estacionales, y con que tanto comercios minoristas como supermercados el mes pasado hicieron precios de oferta", señaló la funcionaria.
En el caso de aceites y harinas, que retrocedieron 7 y 4% respectivamente, se trata de productos que registraron fuertes incrementos a principios de año con motivo de la devaluación, pero en el indicador de octubre parecen haberse acomodado al verdadero poder adquisitivo de la población.
Más allá de los motivos puntuales, la estabilidad de los precios en la economía se relaciona con la escasa variación de la cotización del dólar -que en octubre incluso cayó respecto del peso- y con el congelamiento de las tarifas públicas.
En efecto, Bevacqua explicó que "si se separan los rubros, los bienes registran en el año una suba del 64,7 %, mientras que los servicios públicos 10,4". Por otra parte, el rubro de otros bienes y servicios cayó alrededor del 1% y también incidió en la reducción de los índices inflacionarios durante octubre.
Comportamiento por rubro
Si se mide por rubros, la evolución de precios fue la siguiente: alimentos y bebidas cayeron 0,3%, la indumentaria 3,6%, vivienda, servicios básicos, atención médica y gastos de salud se mantuvieron igual que en septiembre, y equipamiento y mantenimiento del hogar subieron 0,5%. Por otra parte, el rubro transporte y comunicaciones aumentó un 0,3%, esparcimiento 0,9%, educación 0,2% y otros bienes y servicios cayeron 1%.
Entre las verduras, las principales caídas de precios se dieron en tomate redondo (41,3%), cebolla (29,4%), zapallito (28%), papa (13,3%) y lechuga (10%). En cuanto a servicios, se produjo una baja del 1 % en el precio del gas en garrafa, en tanto se mantuvieron estables los valores del gas natural en red, electricidad, colectivo urbano y el servicio telefónico urbano.
Al por mayor
Por otro lado, el índice de precios internos al por mayor subió el 0,9 %, debido a subas en la misma proporción en productos nacionales e importados.
Dentro de los productos nacionales, los bienes primarios registraron una deflación de precios del 0,1%, mientras que los industriales y energía eléctrica subieron 1,3 %.
El costo de la construcción en el Gran Buenos Aires registró una suba también del 0,9% producto de una suba del 1,3% en materiales, 0,2% en mano de obra y del 0,7% en gastos generales.
Si se compara el índice de la construcción del mes pasado con octubre de 2001, se nota un incremento de costos del 40,8%.
Este incremento está vinculado con el reinicio de algunas obras públicas que estaban paralizadas, y en el transcurso de 2002 el costo de la construcción subió 41,1%.