Las subcontratistas de Puentes del Litoral se pusieron en marcha para completar el asfalto de la conexión Rosario-Victoria, a dos días hoy del anuncio presidencial de girar los 51,6 millones de pesos finales para la terminación de la obra. El presidente Eduardo Duhalde hará público el compromiso el martes en Buenos Aires cuando firme el decreto, y en la misma semana el gobierno desembolsará los primeros 10 millones.
El pavimento se detuvo en marzo al ocupar poco más de un tercio de la traza, unos 20 kilómetros aproximadamente del lado de Victoria. Y ahora la subsidiaria Iacsa retomó los aprestos para trabajar duro desde el 1º de noviembre en dos frentes: continuando la carpeta comenzada en Victoria e iniciando otra desde Rosario de manera de encontrarse en el medio de la losa de 60 kilómetros.
"Gracias a Dios este sueño se va a concretar, ya lo estamos sintiendo", declaró ayer a La Capital Adolfo Mittelman, un comerciante de 75 años presidente de la Comisión de Apoyo al puente. "Las firmas contratistas ya están pidiendo capataces y obreros, y varios ingenieros de obra buscan viviendas en alquiler", apuntó.
Daniel Zabala, presidente de la Federación Económica de Entre Ríos, apuntó la llegada de material de asfalto al obrador montado en la isla más cercana a Victoria y el puente, donde también se nota mayor movimiento de camiones. "Todo indica que el 1º de noviembre arrancarán con todo, así que las expectativas son mayores", dijo.
El intendente Jorge Valverde prefirió mostrarse cauto, sin el menor desborde de entusiasmo. "Esperemos hasta el martes, cuando seguramente se sepa el final de la historia", sugirió, y estimó: "A fin de mes podría comenzar la labor pero a un anuncio concreto, firme, ahora no me arriesgo".
Nuevas condiciones
Puentes del Litoral detuvo los trabajos siete meses atrás a raíz de la caída de un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID); faltaba el 10 por ciento de la obra. Desde ese momento emprendió negociaciones con el Estado nacional que no tuvieron resultados sino hasta la semana pasada.
Allí se acordó que el gobierno adelante 51,6 millones de pesos (en desembolsos parciales) y que la empresa resigne un porcentaje de la tarifa de peaje que se había firmado antes de la devaluación. Así, entonces, se dispuso que cada automovilista pague 5,45 pesos más IVA, deducido de la pesificación de los 7,50 dólares más IVA establecidos por contrato más una rebaja del 30 por ciento.
Puentes del Litoral debía invertir 141,1 millones de dólares, de los cuales alcanzó a colocar 105 millones (cuando estaban uno a uno). Por el otro lado, el aporte del Estado nacional y provincias de Entre Ríos y Santa Fe llegó a 241 millones de dólares, volcado el ciento por ciento.
Entre las obras que restan, además de los 45 kilómetros de carpeta asfáltica, se encuentran las cabinas de peaje, teleinformática del sistema, iluminación, protección de los cabezales de los pilotes y barandas laterales o guardarrails.
La Capital informó de las negociaciones paso a paso y adelantó el anuncio presidencial el miércoles pasado. Ese día, en la ceremonia de entrega del puerto de Rosario a un grupo catalán, el gobernador Carlos Reutemann dio por hecho la resolución del tema y hasta tuvo palabras cálidas hacia Duhalde. "Lo lógico sería que el presidente pudiera inaugurar la obra antes del 25 de mayo, pero es una cuestión que va a decidir él, no sé cuáles son los tiempos", expresó.
La ciudad de Victoria, en tanto, parece estar recibiendo algunos anticipos de la transformación que le podrá acontecer. Siete días atrás vivió un brillante fin de semana largo con la llegada de turistas que superaron los cálculos y completaron las habitaciones de hoteles y hosterías (incluso porteños de buenos ingresos que se alojaron en la abadía benedictina).
Comerciantes de esa ciudad de 36 mil habitantes hacen notar también el notable crecimiento de las exportaciones de miel y sábalo que se está produciendo. Otros, además, ponen como dato alentador un emprendimiento que tiene como impulsores a rosarinos: el hotel-casino cuatro estrellas que lleva adelante la constructora Cachero-Kozuch en zona costera, cuya edificación -si bien lenta- no se detuvo en los momentos críticos recientes. Parece que su inauguración tiene fecha cercana al puente: marzo o abril de 2003.