Las ONG, por las tareas comunitarias

Las organizaciones no gubernamentales (ONG) están de acuerdo con que el subsidio a los jefes de hogar desocupados tenga una contraprestación laboral. Sin embargo, también recuerdan que "no se trata de ningún regalo del gobierno", sino "del reconocimiento del derecho a la inclusión", como sostuvo el segundo de Cáritas, Osvaldo Bufarini.
Y en esa línea, exigen que el Estado genere políticas activas para darles un lugar en el mercado laboral. Desde la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y la Federación de Tierra y Vivienda, por ejemplo, reclaman que esos lugares no reemplacen puestos de trabajo genuinos, sino que se inscriban en proyectos comunitarios.
La fecha del 31 de octubre próximo como el plazo del gobierno nacional para recibir un listado exhaustivo con la contraprestación laboral de cada jefe de hogar ya fue confirmada.
Sin embargo, para Bufarini difícilmente equivalga a un ultimátum. "Años de experiencia me dicen que habrá una prórroga, porque hay que preparar a las empresas y a las ONG para que den un lugar a los jefes de hogar, de modo que poco a poco puedan reinsertarse en la sociedad", sostuvo.
Un activo militante de la CCC en Rosario, Eduardo Del Monte, sostuvo que todos los miembros de su organización que cobran el plan ya realizan "tareas en sus comunidades de pertenencia, como en roperitos, comedores, copas de leche, limpieza barrial o guarderías". Sin embargo, rechazó que las empresas empleen a jefes de hogar a través del subsidio "porque aumentaría la precarización laboral".
Una postura similar esgrimió el dirigente de Tierra y Vivienda Juan Carlos Rodríguez. "Haremos una presentación judicial para impedir que se tomen jefes de hogar en tareas que ya fueron presupuestadas, como lo hizo en su momento la Municipalidad con Obras Públicas, porque eso atenta directamente contra el empleo genuino", sostuvo.
También definió como "una medida de terror que se culpe a los compañeros que aún no realizan la contraprestación" porque "falta información" y porque "puede ser una nueva estrategia para dar de baja a gente que viene cobrando".