El economista Aldo Ferrer consideró que Argentina aún está "ingiriendo las consecuencias del derrumbe de todo el esquema de convertibilidad", tanto desde el punto de vista monetario como de las políticas de inversión externa, que "llevó al extremo la extranjerización y al desequilibrio de la balanza de pagos", acotó. Antes de la entrevista con La Capital, el referente del Plan Fénix disertó para un nutrido grupo de personas y economistas que colmaron las instalaciones del Consejo Profesional de Ciencias Económicas. Ferrer, a pesar de apoyar al ministro de Economía en algunas decisiones sobre política económica, estimó que las destinadas al control cambiario se adoptaron tarde, pero "las medidas tomadas van en el buen sentido". Respecto a las perspectivas para el próximo año, el economista remarcó que la mayor incertidumbre pasará por el plano político más que por lo que suceda en el plano económico. De todas formas, Ferrer buscó dejar en claro es que "se han ido los fantasmas de caos e hiperinflación que muchos pregonaron".
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