Apertura 2002

River ganó y no le pierde pisada al rojo

Los millonarios vencieron 4 a 2 a Unión, en su cuarto triunfo seguido

River Plate pasó sin escalas del infierno al cielo. En los últimos 17 minutos transformó en victoria 4 a 2 lo que parecía ser un empate cantado ante un Unión que hizo casi todo bien, pero se quebró sobre el final, más precisamente desde el instante en que Guillermo Pereyra convirtió el 2-1 con un cabezazo.
En consecuencia, River ganó pero pudo haber perdido. Si no lo hizo fue porque los delanteros de Unión fallaron cuando enfrentaron a Comizzo. Ya en el arranque, Unión le quitó la pelota a River y manejó a su antojo los tiempos del primer período. Por eso no extrañó que a los 21' Unión se pusiera arriba en el marcador tras un cabezazo goleador de Torres.
Obligado a despabilarse, River intentó presionar al equipo santafesino, pero debió llegar al empate tras una circunstancia bastante antipática. El arquero Nereo Fernández la tiró al lateral al estar supuestamente dolorido y los jugadores de River no le devolvieron la pelota a Unión, lo que molestó a los visitantes. A continuación D'Alessandro fue derribado en la puerta del área y Alejandro Domínguez clavó un golazo de tiro libre que les dio la igualdad a los millonarios.

Cambios decisivos
Los cambios en el complemento resultaron decisivos para el cotejo. En el arranque Guillermo Pereyra ingresó por el colombiano Jersson González y River se paró con una línea de tres en el fondo. Pero el cambio más trascendental fue el de Cavenaghi por Astrada. El goleador del torneo anterior convirtió dos tantos y fue vital para que River se quedara con los tres puntos en una tarde en la que había jugada decididamente mal.
River, al cabo, tuvo el premio a su búsqueda y a no resignarse nunca. Se puso 2-1 a los 28', con aquel cabezazo cruzado de Pereyra tras centro de D'Alessandro, quien se había equivocado sistemáticamente durante casi todo el partido y sobre el final participó en las jugadas de dos goles, cambiándole un poco la cara a su actuación.
El 3-1 llegó con un rebote que recogió Cavenaghi. La volea goleadora de Zapata, a los 40, que se metió en el arco tras pegar en el horizontal de poco le sirvió a Unión, porque un minuto más tarde el Chori se fue por derecha y mandó el centro que Cavenaghi envió a la red con un toque corto.
River ganó su cuarto partido seguido, pero nada más. Si vuelve a jugar como contra Unión difícilmente podrá arruinarle el campeonato a Independiente. (DyN)

Pereyra y D'Alessandro gritan con todo el segundo gol.