El director técnico de Racing, Osvaldo Ardiles, manifestó que él "también sería hostil" con su propia persona, al ser consultado sobre los insultos con los que la hinchada de su equipo lo despidió al término del partido ante Gimnasia. "Yo también sería hostil conmigo mismo, no me gustan los cánticos, pero estuve en situaciones peores que esta y salí adelante. En Argentina se pasa del amor al odio en 90 minutos. Posiblemente sea la tarde más ingrata desde que estoy en Racing, pero esto me da fuerzas para seguir trabajando. Para mí no es complicado vivir con esta presión", dijo el ex campeón mundial en Argentina 78. "Nos falta balancear el mediocampo y se pierde equilibrio rápidamente. Jugamos dos veces por semana con los mismos jugadores en el torneo Apertura y la Copa Sudamericana y eso nos saca rendimiento", agregó el entrenador racinguista.
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