La resolución sobre Irak del Congreso concede al presidente de Estados Unidos amplios poderes para lanzar un ataque militar contra el régimen de Saddam Hussein. Ante todo, una invasión de Irak no debe ser autorizada por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Y en el caso de una acción militar, Bush debe informar al Congreso cada 60 días. Los puntos principales de la resolución incluyen la autorización al presidente a desplegar las fuerzas de combate estadounidenses si lo considera necesario y propio para defender la seguridad nacional de Estados Unidos contra la persistente amenaza por parte de Irak y aplicar todas las disposiciones correspondientes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas respecto a Irak. En relación al ejercicio de su autoridad el presidente, tan pronto como sea posible, pero no más tarde de 48 horas, debe informar al presidente de la Cámara de Representantes y al presidente del Senado de su decisión (sobre el uso de la fuerza contra Irak). Esto ocurriría si medios diplomáticos adicionales u otros medios pacíficos por sí solos no protegen lo suficientemente la seguridad nacional de Estados Unidos contra la persistente amenaza por parte de Irak, ni conducen probablemente a la aplicación de todas las resoluciones relevantes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. * Pakistán: avance integrista. La alianza islamista antiestadounidense MMA consiguió en las elecciones paquistaníes un gran avance según los votos escrutados hasta ayer, aunque fue superada por el partido PML-Q, cercano al presidente Pervez Musharraf, y por el Partido Popular de la ex primer ministra Benazir Bhutto. El resultado fue interpretado como una protesta contra el alineamiento de Musharraf con la campaña antiterrorista liderada por Washington, imprescindible para la guerra contra los talibán y la organización Al Qaeda en Afganistán, hace un año. Se espera una ardua negociación para formar gobierno, ya que ninguna agrupación consiguió una clara mayoría. * Líbano hace "buena letra". La justicia libanesa decidió iniciar acciones legales contra 22 árabes y turcos, acusados de intentar formar "una célula terrorista" ligada a Al Qaeda. Un juez militar inició acciones penales contra dos libaneses y un saudita, detenidos en Líbano. También contra otras 19 personas de origen libanés, saudita, palestino, yemenita y turco. Estas personas pueden ser castigadas con penas de prisión que serían, como mínimo, de cinco años.
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