El testigo

Hernán Anillo, el comerciante que fue testigo de la detención de la menor violada por tres policías dentro de la comisaría 1ª, brindó ayer su testimonio ante el juez Adolfo Prunotto Laborde. Al salir del juzgado, el joven dijo haber ratificado todo lo publicado por este diario el pasado martes y sentirse "cómodo y sin presiones". Además, pidió a "los otros testigos que presenciaron el arresto que se presenten a declarar" y no lo dejen "solo ante este hecho". "Lo único que yo puedo acreditar es que presencié un arresto con visos de violencia que no figura en los libros (de la comisaría), pero sobre lo que pasó después no puedo decir nada", aclaró Hernán. También contó que si se guía "por el tenor de las preguntas y el diálogo con el secretario del juez" tiene "la impresión de que están muy metidos en el tema".