Osvaldo Flores / La Capital
Villa Constitución. - A fines del presente mes, plazo en que vence la habilitación provisoria de la concesionaria Toc Bus SRL, esta ciudad podría quedar sin servicio de transporte de pasajeros. Para otorgar la habilitación definitiva, la Municipalidad exige a la empresa que traslade sus galpones a otro sector de la ciudad, aunque los propios vecinos de Toc Bus afirman que esas instalaciones "no causan ninguna molestia".
En tanto, y mientras aguardan una reunión que mantendrán esta mañana con autoridades municipales, los propietarios de la empresa -diez choferes que hace un par de meses se hicieron cargo del servicio tras comprar seis colectivos y la concesión hasta el año 2007- aseguraron que esta situación irregular no les permitió recibir el subsidio estatal al transporte y tampoco pueden comprar el gasoil a 82 centavos el litro como el resto del sector.
"Cuando la empresa Dohm decidió retirarse del servicio los choferes nos hicimos cargo de la concesión. Nos endeudamos en 80 mil pesos y emprendimos una empresa manejada por los trabajadores, lo que por sí sólo debería ser un ejemplo, pero ahora la Municipalidad nos exige que nos vayamos de estas instalaciones para darnos la habilitación definitiva", señaló Darío Riera, unos de los socios-choferes de Toc Bus.
"De la oficina de planeamiento nos dieron un mapa con ocho o nueve ubicaciones que podríamos optar. Dos de esos galpones no tienen techo, otro piden más de dos mil pesos de alquiler, uno de esos lugares está ocupado por gente careciente y los restantes son lotes baldíos donde hay que construir", explicó Riera.
"La empresa Dohm -añadió- funcionó cinco años en este mismo lugar, pero a nosotros, que estamos cumpliendo bien con el servicio y juntamos moneda sobre moneda para poder funcionar, nos exigen que nos vayamos. Tenemos 40 firmas de vecinos de este barrio que aseguran que no causamos ninguna molestia, porque aquí sólo funciona la administración y un garaje, donde hay un solo coche de guardia en todo el día".
Hace un par de meses, la empresa Dohm SRL traspasó el contrato de concesión y sus unidades a diez de sus choferes, que se hicieron cargo del servicio. Los trabajadores compraron los coches con el dinero que debían haber percibido en concepto de indemnización.
Sin embargo, las felicitaciones oficiales por aquella decisión de los trabajadores de seguir confiando en su ciudad se convirtieron ahora en trabas para continuar funcionando. "Si no podemos seguir funcionando corremos peligro de perder nuestras viviendas, que son garantía de los 80 mil pesos que debemos", advirtieron los trabajadores-empresarios, que en sólo dos meses de funcionamiento lograron crear otras tres fuentes de trabajo.
Más allá de las consecuencias personales para los emprendedores choferes, la irregular situación podría perjudicar gravemente a los usuarios villenses. En principio, la empresa no pudo percibir el subsidio estatal al transporte de 900 pesos por coche, y tampoco puede acceder a la compra de gasoil a 82 centavos por litro por carecer de habilitación definitiva. Hoy, el combustible les cuesta 1,35 peso el litro, aunque aún no han trasladado ese costo al precio del boleto.
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La Ciudad
