Blancanieves, la princesa de la fábula nacida de la fantasía de los hermanos Jakob y Wilhelm Grimm, no sería alemana sino italiana, originaria del Veneto, afirmó el experto en leyendas, Giuliano Palmieri, quien expone su teoría en el libro "Los reinos perdidos de los Montes Pálidos". Según Palmieri, estas narraciones están ambientadas en minas de hierro del área de Cordevole, donde está el monte Pore y la zona del Fusil, activas hasta el siglo XVIII para fabricar armas blancas destinadas a la República de Venecia y a otras naciones europeas. De acuerdo a sus estudios, la región estuvo hasta 1918 sometida bajo al imperio astro-húngaro y allí se asentaron una gran colonia de germanos que una vez terminado el trabajo regresaron a su país con el recuerdo de una antiquísima costumbre que originó el mito de Blancanieves. En las minas, explicó el italiano, cuando un yacimiento se agotaba se enviaba a una joven bella y noble al centro del lugar para que transmitiera a la Madre Tierra su energía vital. Y en los alrededores del Monte Pore aún sobrevive una leyenda que habla de una curandera experta en venenos, un personaje identificable como "la bruja" de Blancanieves. Palmieri afirma que es muy posible que los hermanos Grimm hayan recogido estos mitos y leyendas de las narraciones de los mineros alemanes que regresaban a la patria y la transformaron en una de las fábulas más célebres del mundo.El experto reunió las tradiciones transmitidas oralmente de una generación a otra que aún sobreviven en las zonas rurales. Además, hay otro elemento revelador relacionado con los siete enanitos de la fábula: la población de los valles mineros de los Dolomitas debía ser de muy baja estatura para poder introducirse en las grietas que llevaban al interior de las montañas.
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