Con el impulso productivo que le dan los precios a la próxima campaña y la retención que están haciendo los productores debido a la desconfianza en el sistema financiero, la poscosecha y la logística de transporte de los granos adquieren una especial importancia.
Esta situación se puso en evidencia durante la semana de la poscosecha que se realizó en la ciudad de Rosario, cuando convivieron dos encuentros que reunieron a los principales referentes sobre el tema: el 5º Simposio de Almacenamiento Cualitativo (Granos SAC 2002) y las Jornadas Nacionales Técnicas de Poscosecha (Jornatec 2002), organizadas por Aposgran.
"Argentina es la luz para Latinoamérica en el manejo de granos", explicó Domingo Yanucci, anfitrión del tradicional SAC que se realizó en el Centro Cultural Parque de España. Días después, durante la jornada que se realizó en la Bolsa de Comercio, el director de Terminal 6, Pablo Ferrés, coincidió y señaló que el desarrollo en infraestructura y logística que experimentó el sector agroindustrial se debe en gran medida al crecimiento de la producción de soja.
Hace años que esta oleaginosa es la vedette de las siembras argentinas y la niña bonita en el manejo y cuidado desde cualquier planta de silos. "La reina de la poscosecha", como gritó un productor en los pasillos de la muestra estática, La soja generó en la década del •80 el desarrollo de infraestructura que permitió optimizar los costos ante el auge que el cultivo marcaba.
Un ejemplo es la construcción de una cadena de elevadores muy eficientes, que bajaron el costo de "elevación", al mover la carga desde el transporte terrestre hasta la bodega del buque en unos 10 dólares por tonelada. Otro pasa por las terminales que surgieron casi exclusivamente del desarrollo y las inversiones de la industria aceitera, donde la soja fue el factor fundamental del cambio. Según Ferrés, para tener una idea de la magnitud del desarrollo, "basta mencionar que en 1980 en los puertos estatales se descargaba un camión en 20 minutos, y se embarcaban de 2.500 a 5.000 toneladas por día.
Actualmente, las inversiones privadas lograron que las terminales pasaron a descargar tres camiones en 5 minutos y a embarcar a razón de 24 a 36 mil toneladas por día. Sumado a la construcción de silos para almacenar la producción y liberar los medios de transporte de su anterior rol de "silos sobre ruedas", se ganó eficiencia.
Logística, seguridad manejo de recursos fueron factores primordiales que sentaron las bases reales del valor creado por el agro, a partir del cual los empresarios del sector aprendieron a medir la distancia a los mercados en dólares y aprovecharon la baja de costos para crecer en producción.
Bancos de granos
Tanto en Granos SAC como en Jornatec 2002, la mirada se centró en la eficiencia y continuo aprendizaje. El silo, como en otros años, motivó muchas disertaciones, y el silobolsa volvió a convertirse en protagonista.
También, el concepto que de la nueva crisis el empresario agropecuario sacó en limpio que es mejor tener su dinero invertido en un silo, capaz de almacenar al grano como su principal riqueza. Ante la fractura del sistema bancario, los "bancos de granos" son una nueva herramienta en la comercialización agropecuaria.
Yanucci explicó que se está situación está estimulando una gran cantidad de inversiones en campos grandes y entre acopiadores, que tienden a aumentar la capacidad propia de almacenaje. No es casual que para muchos, guardar granos y comercializarlos en forma autónoma sea un excelente negocio.
El destino agroexportador de la Argentina quedó, en ambos encuentros, expuesto con todo el énfasis. Ferrés destacó el desarrollo del sector en los 90 y la movilización de inversiones que implicó en el transporte, la logística granaria, construcción de silos, incremento en la capacidad de almacenaje de granos, el ferrocarril y vías navegables. Atribuyó estas transformaciones al efecto d la estabilidad cambiaria, la eliminación de las retenciones a las exportaciones, la desregulación, las privatización, la descentralización del sistema portuario, las obras de infraestructura, el desarrollo dela industria aceitera y el cambio de enfoque de los productores, que pasaron a ser empresarios agropecuarios. Ahora, con el nuevo marco económico, mantener esta tendencia es todo un desafío.
La Ciudad
