Walter Palena - Carlos Colombo / La Capital
La presencia del ex presidente Carlos Menem este viernes en la cabecera del puente Rosario-Victoria, donde realizará un acto, fue tema obligado en la conferencia de prensa que ofreció ayer el gobernador Carlos Reutemann, quien admitió no tener "inconvenientes" en reunirse con el ex mandatario y titular nacional del justicialismo, pero dijo que aún no existió ninguna comunicación para formalizar el encuentro. Menem tiene previsto cruzar el puente para llegar a Rosario a las 18, luego de realizar dos actos en Victoria.
"El acto en Rosario será a las 18 y Menem va llegar por el puente, lo va a cruzar desde Victoria, y estimamos que habrá una multitud esperándolo", aseguró ayer a La Capital Antonio Riccillo, jefe de campaña en Santa Fe.
El ex presidente estará primero en la ciudad entrerriana donde le rendirá un homenaje al fallecido dirigente radical César Chacho Jaroslavsky, amigo personal de Menem. A las 15, junto a la hija del Chacho, la diputada nacional Gracia Jaroslavsky, colocarán una placa en el panteón donde descansan los restos del caudillo radical.
Posteriormente, a las 16, en la cabecera del puente (en Victoria), Menem encabezará una acto, donde los organizadores estiman que habrá "10 mil personas".
En tanto, Menem recibirá hoy en Pilar a un centenar de dirigentes santafesinos, intendentes, presidentes de comuna y legisladores, quienes le brindarán su apoyo y terminarán de organizar el acto de Rosario, donde el ex presidente será el único orador.
Por su parte, Reutemann relativizó ayer los encuentros que viene sosteniendo con varios precandidatos presidenciales e ironizó sobre las supuestas ventajas que le otorgaría a esos dirigentes mostrarse a su lado. "Mi despacho no es ningún santuario ni les voy a dar buena suerte", ironizó.
En cuanto al acto de Menem, el gobernador no dio precisiones sobre un eventual encuentro. "Lo único que sé es que va a estar en Rosario, pero también me dijeron que podría ir a Santa Fe. También dicen que irá primero a Victoria y luego hace el acto en la cabecera del puente", apuntó.
De todos modos, admitió que si le solicita una reunión lo va a atender como hizo con el resto de los candidatos que peregrinaron por su despacho. "No tengo inconvenientes de que pasen a saludarme cuando vienen a Santa Fe, y si no quieren porque les parece cholulo, tampoco tengo problemas", precisó, en obvia alusión a Adolfo Rodríguez Saá, quien días atrás empleó ese término para justificar su decisión de no mostrarse junto al Lole.
Reutemann sostuvo que en las próximas elecciones la ciudadanía centrará la atención en el perfil que muestren los candidatos, en la correspondencia entre palabras y hechos, y no en los supuestos réditos políticos por mostrarse junto a él. "Con todo lo que ha sucedido en la Argentina en estos dos últimos años, me parece que alguien que busque el apoyo de otra persona no se traduce automáticamente en lo que va a hacer después la gente", enfatizó.
En esa línea, precisó que la población tiene que estar atenta a lo que ofrezca cada uno de los candidatos y luego optar por la mejor opción. "Mi apoyo no sirve y las fotos tampoco", insistió.
Reutemann rechazó toda posibilidad de estar junto a Menem en Rosario por tratarse "de un acto proselitista", y recordó que "yo no estoy en campaña ni soy candidato".
Ante la insistencia de las voces que todavía se alzan para que revea su decisión de no ser candidato, el Lole admitió recibir constantemente llamados de dirigentes y empresarios: "No puedo impedir que alguien diga que le gustaría que participe en las elecciones, pero la decisión está tomada desde hace tiempo".
En otro orden, la Junta Promotora Menem 2002, que preside Oscar Cardozo, convocó a "seguir acompañando la presencia de nuestro futuro presidente", an relación a la visita del riojano.
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