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Causas y efectos

En los últimos tiempos se han hecho estudios muy sesudos sobre causas y efectos de la sociedad posindustrial. Creo que el tema no se ha encarado desde un punto de vista que muestre de una manera incontrastable el abismo entre dos épocas. Me refiero a la actividad más grata y fecunda en sus derivaciones que ejercita la humanidad desde que existe. Hasta hace unas décadas esa actividad fue conocida con el término "fratachar" o de una manera menos áspera "franelear". En el "Asno de oro", que carga sobre su lomo cerca de dos milenios, se la nombra como "pulir". Imágenes fabriles, artesanales, que dejan una impresión manual circular. El nuevo modo de designar esa actividad fundamental implica un corte total entre una cultura que viene de lo profundo de los tiempos y una nueva e incierta era. Actualmente a esa sana costumbre se la llama "apretar" o "transar", palabras más bien de la jerga mercantil o tal vez del hampa. Puede argumentarse que también se la conoce como "curtir", que es eminentemente manual, pero con una connotación prefabril o preartesanal. Hombres de las cavernas vestidos con pieles. Una manera atroz de referirse a una actividad que debe ser amable. Tal vez esto signifique que toda época gesta en sus entrañas un retorno a sus orígenes.
Gabriel Ferrari