Washington. - El cerebro de los atentados terroristas del 11 de septiembre, Ramzi Bin al Shibh, fue detenido en Pakistán y ya ha pasado a manos de EEUU, según informó anoche la cadena de televisión estadounidense ABC.
Ramzi no participó en los atentados porque las autoridades norteamericanas no le concedieron el visado de entrada. Sin embargo, este dirigente yemenita de Al Qaeda de 30 años, se reunió con Mohamed Atta, el piloto suicida que se estrelló con el primer avión que impactó contra las Torres Gemelas, y otros miembros de la red terrorista de Osama Bin Laden en Madrid, el 10 de julio, para "ultimar detalles" sobre los ataques.
Ramzi llegó al aeropuerto madrileño en un vuelo turístico procedente de Alemania el 9 de julio, el mismo día que Atta aterrizaba en Madrid en un vuelo procedente de Miami.
Los expertos señalan que a la reunión de los dos terroristas mencionados asistieron otros que vinieron de Francia. Atta y Ramzi, que se conocían desde hacía años, se encontraron en las proximidades de la localidad catalana de Salou. En esta localidad se hospedó el piloto suicida y jefe del comando que efectuó el ataque múltiple del 11 de septiembre de 2001.
Ramzi se alojó en el hotel Mónica, de Cambrils, una localidad próxima a Salou. Iba acompañado por otra persona con rasgos árabes, a quien la policía española no ha podido identificar. Desde Salou viajaron a un lugar próximo a la frontera hispanofrancesa donde, presumiblemente, se vieron con el dirigente Abu Khaled.
Ramzi, que disponía de un pasaporte de Yemen expedido el 12 de noviembre de 1997 y con validez hasta la misma fecha de 2003, permaneció en España hasta el 16 de julio y regresó a Alemania tres días antes de que Atta volviera a Estados Unidos.
El operativo se pone en marcha
Una vez en en su residencia de Hamburgo, puso en marcha el plan acordado en la costa catalana. Tras recibir 15.000 dólares en dos transferencias cursadas por Hashim Abulrahman desde los Emiratos Arabes, hizo llegar ese dinero a su enlace en Estados Unidos.
El 1º de agosto, tomó un tren de Hamburgo a Dusseldorf y, desde la misma estación de ferrocarril de la ciudad alemana envió parte del dinero a una cuenta de Oklahoma, EEUU, a nombre de Zacarías Moussaoui. Moussaoui era hasta ahora el único detenido en Estados Unidos por los atentados del 11 de septiembre y ha sido identificado como el secuestrador número 20. Ahora, la detención del planificador de Al Qaeda, podría permitir a los servicios de inteligencia de EEUU acceder a información de valor estratégico.
La imagen de Ramzi reapareció meses después en Afganistán, en una grabación de video hallada por las tropas norteamericanas entre las ruinas de un cuartel militar de los talibanes destruido por los bombardeos norteamericanos. En esa grabación, Ramzi, con un turbante rojo, proclama la Guerra Santa contra los americanos. La policía española no había vuelto a tener noticias de él hasta que hace unos días el servicio secreto alemán se enteró de que un periodista de Al Jazeera lo había entrevistado. (DPA)
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