Marcelo Carné / La Capital
El diputado nacional de la UCR Carlos Iparraguirre afirmó que la bancada del radicalismo en la Cámara baja "no debe variar su postura de impedir la estrategia del oficialismo de buscar el archivo de los dictámenes acusatorios contra los ministros de la Corte", porque ello sería "consagrar un nuevo pacto de impunidad y otra vez pondría a nuestro partido en la responsabilidad histórica de haberlo convalidado". En una elíptica alusión a la administración duhaldista y su evidente intención de bajarle el pulgar en la Cámara de Diputados al dictamen acusatorio suscripto por la mayoría de los miembros de la comisión de Juicio Político, el legislador del radicalismo afirmó: "Los mismos que en febrero nos pedían que impulsáramos el juicio y que lo termináramos a la brevedad, hoy nos dicen que los ministros deben seguir en sus cargos y que seguir adelante con él o mantener el dictamen acusatorio constituye un atentado contra la seguridad jurídica y las instituciones". Iparraguirre sostuvo que "sería muy lamentable que, una vez más, la presión del gobierno nacional a los gobernadores fuera el desencadenante de un cambio en la posición sostenida hasta la fecha" por la UCR. Reclamó además a sus pares del PJ "que retomen la actitud original y sean consecuentes con el camino transitado, acompañando el impulso de la acusación que en definitiva responde a un mandato constitucional de control que la Cámara de Diputados no puede resignar". Según el legislador, "si el dictamen de la comisión de Juicio Político buscaba acreditar que varios de los ministros de la Corte han utilizado el poder que la Constitución les otorga en beneficio propio, en resguardo de sus propios intereses y de los intereses de los amigos del poder, lo ocurrido en los últimos meses en la Argentina constituye la prueba mas cabal de tal afirmación". Tras asegurar que es "intolerable la coacción que hoy ejercen los miembros del tribunal", Iparraguirre advirtió que si su agrupación política "varía la posición que ha venido sustentando con coherencia hasta el momento, repetiría la historia de la derogación de la ley de subversión económica y transitaría otra vez el sendero que desde la gestión de De la Rúa nos ha llevado a fracaso tras fracaso".
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