Buenos Aires.- Eduardo Cortiletti, uno de los tres condenados a reclusión perpetua por el secuestro y asesinato del empresario Pedro Peralta -ocurrido en 1996- liberado tras un fallo polémico de la Suprema Corte bonaerense, fue atrapado ayer en una casaquinta del partido bonaerense de Moreno. En tanto, anoche continuaba prófugo Carlos Pages mientras horas después de la orden judicial había sido atrapado el tercer hombre: Dante Tartaglini.
Enterada de la detención de Cortiletti, Norma Batagliese -esposa de Pedro Peralta- manifestó su "inmensa alegría" por la recaptura y rogó para que "los acusados no vuelvan a salir de prisión". La mujer dijo: "pensé que a los condenados no los iban a agarrar nunca más".
Para los investigadores judiciales "la colaboración de los vecinos de Villa Trujui, en el partido bonaerense de Moreno fue una de las claves para lograr la detención de Cortiletti".
"Vecinos del barrio de Trujui vieron llegar a este hombre con su familia. Al parecer lo reconocieron por las imágenes que se exhibieron durante el fin de semana en los medios y esto permitió la detención", contó una fuente judicial.
Por su parte, el comisario inspector Miguel Angel Pérez, jefe de la Departamental de Mercedes con jurisdicción en la zona donde fue atrapado Cortiletti dijo que el condenado "estaba junto a su familia y los caseros de la casa quinta en la que estaba recluido y no resistió el operativo policial desplegado para su captura dada la diferencia numérica".
Fallos contrarios
Tartaglini, Cortiletti y Pagés son los autores confesos del homicidio del empresario metalúrgico Pedro Peralta, un caso que comenzó el 10 de mayo de 1996 cuando el hombre fue secuestrado en su casa de la localidad de Caseros. Tras varios pedidos a la familia del empresario de un rescate de 400 mil pesos, Peralta fue asesinado y su cuerpo introducido en un tanque con cal viva, donde fue hallado el 2 de junio de 1996. El hombre había sido asesinado a martillazos, trompadas y patadas, y en la ocasión los cuatro acusados de secuestrarlo y matarlo fueron detenidos en un gigantesco operativo policial.
En mayo de 2000, Pages, Cortiletti y Tartaglini fueron condenados a la pena máxima prevista en el Código Penal y las defensas apelaron la condena a las instancias superiores, además de pedir la libertad de los detenidos hasta que se dictara una sentencia firme.
La Sala I de de la Cámara Penal de Morón, que los condenó, solicitó a la Cámara de Casación bonaerense que resolviera los planteos. Entonces, los camaristas entendieron a principios de la pasada semana que los planteos debía resolverlos la Sala de Morón, y sugirió que respetaran la doctrina "Miranda" que ellos aplicaron en una causa anterior. Por eso "los camaristas de Morón liberaron a los secuestradores".
Fue así como en los últimos días los confesos asesinos recuperaron su libertad y Tartaglini volvió a vivir en su casa de la localidad de Caseros, a 10 cuadras de donde viven la viuda y el hijo de la víctima. Allí fue apresado la tarde del sábado. (Télam)
La Ciudad
