El gobierno bonaerense demandará por más de 600 millones de dólares a la empresa Azurix, ex concesionaria del servicio de agua potable y cloacas en más de 70 distritos de la provincia, por el abandono de la concesión en marzo último. El subsecretario de Servicios Públicos bonaerense, Eduardo Sícaro, confirmó ayer que "la demanda que va a iniciar la provincia a la empresa Azurix se presentará en la justicia contenciosa-administrativa con el fundamento del abandono de la concesión".
El 7 de marzo pasado la provincia de Buenos Aires, tras conformar la sociedad anónima Aguas Bonaerenses, se hizo cargo del servicio de agua potable y cloacas en 71 localidades bonaerenses, que estaban en manos de la empresa Azurix y que atendía a más de 2.500.000 personas. En octubre del año pasado, Azurix, subsidiaria del grupo norteamericano Enron, informó al gobierno bonaerense que se retiraba de la concesión a partir del 2 de enero próximo por incumplimiento de parte de la provincia, lo que fue rechazado por el gobierno bonaerense.
Posteriormente, la empresa anunció que continuaría hasta el 2 de marzo último a fin de no abandonar el servicio durante la época estival. Luego de varios cruces entre funcionarios del gobierno y autoridades de la empresa, que fundamentaron su retiro de la concesión en el incumplimiento de la provincia de cláusulas del contrato, en marzo se formalizó el traspaso del servicio a manos de Aguas Bonaerenses. Azurix, se había hecho cargo de la prestación del agua y cloacas en 1999, durante la gestión de Eduardo Duhalde, cuando pagó un canon de 438 millones de pesos, casi tres veces más de lo que ofrecieron los restantes oferentes en la licitación.
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La Ciudad
