Roxana Latorre: "Una buena manera de salir del asistencialismo"

La senadora dirige una fundación que también promueve los microemprendimientos

Diego Veiga / La Capital

La senadora nacional Roxana Latorre consideró que la puesta en marcha de líneas de créditos para personas de bajos recursos "es una muy buena manera de salir del asistencialismo. Es fantástico que estas experiencias se multipliquen en todas las ciudades", señaló la legisladora, quien ayer encabezó el acto mediante el cual la fundación que preside, Red Social, lanzó los primeros créditos para cuatro grupos de personas por un valor total de 4 mil pesos.
Los beneficiarios utilizarán el dinero en distintos emprendimientos como la elaboración de dulces artesanales, tejidos de lana e hilo, alfajores, hamburguesas y chorizos. Entre quienes accedieron a los préstamos otorgados por este banco de pobres, también se incluyó a un gasista que necesitaba los fondos para pagar su matrícula.
La idea de generar estas nuevas líneas de créditos para personas de bajos recursos nació el año pasado, cuando la fundación Red Social tomó contacto con la fundación Grameen -una entidad creada por el economista Mohammad Yunus- . Gracias a ese acuerdo, expertos hindúes capacitaron a más de un centenar de personas en Rosario. Y la ciudad se convirtió en la décima del país en establecer convenios con la entidad creada por el premio Nobel de economía.
La línea de créditos que se lanzan bajo la capacitación de la Fundación Grameen permite acceder a montos de hasta 500 pesos por mes y tienen un plazo máximo de devolución de 50 semanas consecutivas a partir de que se selecciona el proyecto.
Para entregar los créditos no existen oficinas, sino que los prestadores buscan a los prestatarios en sus casas y las reuniones se realizan en los barrios.
Cada proyecto que se evalúa está compuesto por grupos de cinco personas, que luego de su presentación, evaluación y reuniones de seguimiento semanales, son aprobados.
Cada préstamo tiene un régimen de incentivos basado en el cumplimiento de parte de los integrantes del grupo. Es decir, cada uno podrá acceder al crédito a medida que el resto empiece a cumplir con su parte y devuelva el dinero recibido.
La línea de créditos posibilita que se echen a rodar distintos emprendimientos productivos que, lentamente, les permiten a los beneficiarios reintegrarse al mercado laboral.
El banco Grameen es la entidad crediticia más grande de Bangladesh. Se trata básicamente de un banco de pobres por el cual el 66 por ciento de sus clientes ya superó holgadamente la línea de pobreza.
El promedio de los créditos que entregan es de 160 dólares y su experiencia ya se montó en 66 países. Es más, el vicepresidente de la Fundación Grameen, Norberto Kleinman, participó ayer del acto de lanzamiento de la primera línea de créditos gestionada a través de la fundación Red Social.