Año CXXXV
 Nº 49.558
Rosario,
viernes  02 de
agosto de 2002
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Crimen de un empresario: La clave puede estar en una agenda
Así lo creen los investigadores del homicidio de Roberto Chizzoni, muerto a balazos en su departamento porteño

Buenos Aires.- Los nombres, números telefónicos y domicilios contenidos en una agenda electrónica secuestrada al empresario Roberto Chizzoni, asesinado en el barrio porteño de Belgrano la mañana del miércoles, son claves para identificar al asesino. Así lo consideraron fuentes de la investigación de un episodio que se descubrió a partir del incendio que el homicida provocó en el departamento de su víctima con las intenciones de borrar pruebas.
Los investigadores insistieron ayer en su sospecha de que Chizzoni fue asesinado por un conocido. Por eso, la pesquisa apuntaba a identificar al criminal "en la agenda y en otra documentación de la víctima secuestrada en el departamento".
Roberto Aquiles Chizzoni, de 64 años, fue asesinado de dos balazos en la nuca en el living de su departamento y el homicida incendió luego el departamento -utilizando una bebida alcohólica- para borrar huellas.
La principal hipótesis de la pesquisa es que el crimen fue cometido por una persona allegada a la víctima, quien se dedicaba a la compra y venta de metales.
El crimen fue cometido por alguien "profesional, que sabía muy bien lo que estaba haciendo" y que para borrar pruebas trató de incendiar el departamento, según dijeron los investigadores tras observar la forma en que fue asesinado el empresario y otros detalles descubiertos en la escena del homicidio.

El agua borró los indicios
Al ingresar al departamento, los bomberos, una vez disipado el humo, advirtieron un cuerpo tapado con una manta y lo sacaron al palier ante la sospecha de que se trataba de una persona desvanecida.
"Este involuntario accionar modificó en parte la escena del crimen, que sumado al fuego y el agua perjudicó la recolección de indicios", dijo una fuente de la investigación.
Los policías hallaron luego, cerca de donde había estado el cadáver del empresario, un guante quirúrgico que habría utilizado el asesino para no dejar rastros. Se determinó luego que el asesino de Chizzoni utilizó una pistola calibre 22 con silenciador. Una vaina de ese tipo de proyectil fue encontrada junto al cadáver del empresario, que estaba en el piso del living al lado de una mesa del departamento de tres ambientes que habitaba en el coqueto barrio de Avenida del Libertador 6270.
Una de las sospechas más firmes que manejan los pesquisas es que Chizzoni fue asesinado por un conocido, ya que la puerta de ingreso al departamento no estaba forzada. "La puerta fue abierta con consentimiento de la víctima", explicaron policías y porteros que custodian durante las 24 horas el edificio.
Los investigadores de la seccional 51 y de la división Homicidios de la Policía Federal están abocados al esclarecimiento del crimen, que instruye el fiscal de Instrucción porteño Daniel Morín.
La policía explicó que Chizzoni estaba divorciado desde hace cinco años y tenía dos hijos, un varón que vive desde hace varios años en Nueva Zelanda y una mujer que vive en Buenos Aires, y está próxima a casarse.
El empresario estaba de novio con una mujer de 40 años, que fue informada del crimen. (Télam)


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