Con el objetivo de despejar cualquier sospecha acerca de un hipotético "pacto de supervivencia" entre el duhaldismo y el menemismo, funcionarios del gobierno nacional salieron a negar ayer haber recibido "apretadas" del entorno del ex presidente y ratificaron que el Ejecutivo "no tiene candidatos" de cara a las internas del PJ. El jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, fue más allá y advirtió que si bien "se habla de arreglos, de temores acerca de la gobernabilidad", el Ejecutivo nacional "garantiza absolutamente la transición, y esto está a la vista. Dejen en paz al gobierno".
Los rumores indican que el presidente Eduardo Duhalde pactó algo más que una tregua con Menem cuando ambos se encontraron el mes pasado en Anillaco: que el ex mandatario respetaría el poder del aparato en Buenos Aires y que el gobierno no apoyaría ni a José Manuel de la Sota ni a ningún otro candidato.
Uno de los que salió al cruce del comentario fue el ministro del Interior, Jorge Matzkin, quien negó que la administración duhaldista haya pensado en un acercamiento con Menem, como consignaron versiones periodísticas.
Matzkin, que admitió mantener "una buena relación" con el riojano, aseguró que Duhalde no le encomendó trabajar por un acercamiento con el menemismo para forjar un supuesto acuerdo electoral y, por el contrario, manifestó que esa hipótesis "no forma parte de las preocupaciones actuales del gobierno".
El ministro salió al cruce de una información periodística acerca de un supuesto acuerdo de convivencia entre Duhalde y Menem, quien participará de las internas del 24 de noviembre para competir por la candidatura a presidente.
La versión, que surgió del menemismo, no descartaba la posibilidad de sellar un acuerdo entre el riojano y Duhalde tras el lanzamiento de De la Sota como precandidato partidario.
En ese sentido, Matzkin expresó no haber escuchado advertencia alguna de dirigentes vinculados a Menem respecto del comienzo de "una guerra" -según los trascendidos periodísticos- en caso de que el gobierno apoye a De la Sota.
Matzkin resaltó luego su compromiso de lograr un proceso electoral "transparente" y volvió a señalar que el gobierno nacional "no tiene candidatos".
Atanasof, por su parte, evitó opinar en torno a esa versión y advirtió: "Hay gente que alucina y no es bueno hacerse eco de alucinaciones".
El jefe de Gabinete aprovechó para asegurar que la Nación "garantiza absolutamente la transición" y pidió a los precandidatos presidenciales que "dejen en paz al gobierno para que pueda trabajar".
Por su parte, el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, criticó a los precandidatos presidenciales porque "no mostraron hasta ahora propuestas ni equipos", y castigó: "Lo que se vio hasta ahora es nada; sólo aprestos personales", dijo el funcionario.
Fernández sostuvo además que este es un país "con muchos conflictos" en el que "no es un momento para tímidos que estén dudando dónde tiene que llevar el barco del país", e insistió en considera que "no es tiempo para cagones, sino para gente decidida y con concepto".
El secretario puntualizó que la postulación de Menem para las internas del justicialismo, que se definirán en las urnas el 24 de noviembre próximo, "debe someterse a la voluntad de los afiliados y de los independientes, que esta vez podrán votar en internas abiertas, y, si supera eso, a la elección general".
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La Ciudad
