Año CXXXV
 Nº 49.542
Rosario,
miércoles  17 de
julio de 2002
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El sindicato policial advierte que las garitas son inseguras

"No podemos brindar seguridad desde la inseguridad. Esas garitas son de cartón pintado", sentenció ayer el secretario general de la departamental Rosario de la Asociación Profesional Policial de Santa Fe (Apropol), Alberto Martínez.
El reclamo se hizo escuchar luego que el Ministerio de Gobierno provincial instalara anteayer cinco garitas en distintas esquinas de la ciudad con el fin de reforzar la seguridad urbana y obtener más proximidad con los vecinos. El vocero del sindicato policial dijo que las garitas son "absolutamente vulnerables", que los agentes tienen chalecos antibalas vetustos, que "es incompatible realizar tareas administrativas y operativas en ese espacio" y que "hay garitas que se iluminan con la luz de una vela".
"Las garitas están hechas con resina plástica con fibra de vidrio. Es prácticamente una cartulina", señaló Martínez. El dirigente agregó que la cabina tiene un material de dos milímetros de espesor, que "no sólo se puede perforar con una bala sino hasta con una piedra".
Las garitas, donde las 24 horas hay un efectivo policial, están ubicadas en 27 de Febrero y San Martín, avenida Pellegrini y Sarmiento, bulevar Seguí y Avellaneda, Donado y Derqui, y Juan José Paso y Provincias Unidas.

Urgencias solamente
La experiencia incluye un servicio adicional, que consiste en extender certificados de extravío o de vecindad, lo que también fue rechazado por Apropol. "El policía debe estar allí solo para atender las urgencias", recalcó Martínez.
El chaleco antibalas es tema de otro reclamo. "Los agentes están con chalecos antibalas que son del año 94 y deben renovarse cada cuatro años, por lo tanto ya están todos vencidos", enfatizó.
Pese a que consideró "interesante" la experiencia de acercar la policía al barrio, dijo que en algunas garitas, como la de Avellaneda y bulevar Seguí, "es insuficiente trabajar con un solo agente. Allí hay muchos casos de robos a mano armada y con armas largas, por lo que es necesario que haya dos o tres policías por turno". Y también se hizo referencia a la falta de infraestructura: "La primera noche (por anteanoche) en la garita de 27 de Febrero y San Martín la única luz que tenía el policía que estaba allí era la de una vela".


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