Asunción.- El gobierno paraguayo decretó ayer el estado de emergencia en todo el país por cinco días luego de una jornada de protesta contra el presidente Luis González Macchi al que se exigió la renuncia. El estado de emergencia o excepción es análogo al estado de sitio. La medida, por la cual el Poder Ejecutivo puede detener personas, allanar propiedades privadas y prohibir protestas publicas, se complementó con otro decreto autorizando a las fuerzas armadas a actuar en tareas de seguridad interior si la policía es rebasada por las manifestaciones. El saldo: un muerto, seis heridos de bala, decenas de contusos y 137 detenidos. El ministro del Interior, Víctor Hermosa, comentó que el estado de emergencia se decretó para "evitar una situación de violencia mayor" luego de los incidentes de ayer. El estado de emergencia fue decretado por cinco días, pero debe ser ratificado dentro de las 48 horas por el Congreso para que alcance esa vigencia. Según el artículo 288 de la Constitución paraguaya, el estado de excepción puede ser declarado por el gobierno o el Congreso "en caso de conflicto armado internacional, formalmente declarado o no, o de grave conmoción interior que ponga en inminente peligro el imperio" de la Carta Magna o "el funcionamiento regular de los órganos creados por ella". El estado de excepción entró inmediatamente en vigencia y permite al gobierno realizar detenciones y traslados de personas que protagonicen los hechos, al margen de los derechos habituales de los indiciados. Previamente, el presidente González Macchi emitió un decreto por el que dispuso la "cooperación" de las fuerzas armadas en apoyo de la policía. El vicepresidente Julio César Franco, quien es jefe del opositor Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) y está enfrentado con González Macchi, respaldó las manifestaciones y convocó a sus seguidores a unirse a las protestas. * Sorpresivas manifestaciones. Las sorpresivas movilizaciones arrancaron con un bloqueo en el puente internacional de La Amistad, que une a Paraguay con Brasil, entre Ciudad del Este y Foz de Iguazú, a 330 kilómetros al este de la capital paraguaya. En Ciudad del Este unas 800 personas bloqueron el Puente de la Amistad y se enfrentaron con la policía que intentaba despejar la ruta. Luego del desalojo, las utoridades reportaron numerosos saqueos en la zona. La policía informó que un hombre mayor de edad murió en un enfrentamiento con agentes policiales que intentaban despejar una ruta nacional 310 kilómetros al este de Asunción, cerca de Ciudad del Este. Según las fuentes, el hombre disparó contra dos suboficiales que resultaron heridos y estos respondieron el ataque. El director del Centro de Emergencias Médicas, José Mayans, aseguró que seis personas permanecían hospitalizadas en estado grave con heridas de bala, entre ellas un niño de 11 años, y decenas fueron atendidas por heridas diversas. Otros dos choques entre policías y manifestantes se registraron cerca de la localidad Itá, al norte de Asunción y en el departamento Cáguazú, al este, con un saldo de 10 heridos. Unos 4.000 opositores también cerraron el acceso al puente internacional San Roque González, entre Encarnación (Paraguay) y Posadas (Argentina) sin que se produjeran mayores incidentes. La policía informó que también se registraron cortes de rutas en los departamentos de Itapúa, Caaguazú, Misiones y Central, además de una concentración frente a la sede del Congreso Nacional en Asunción, que reunió a unas 600 personas que fueron desalojadas por la policía. Hubo por lo menos 30 detenidos. Con bombas de gas lacrimógeno y balas de goma los agentes policiales ocuparon el lugar en el que momentos antes los manifestantes armaban sus carpas con el objetivo aparente de quedarse varios días y desarrollar una campaña antigubernamental. "El desalojo de la plaza se realizó porque los manifestantes no acataron la orden que desde hacía al menos 15 minutos les hicimos, en base al decreto de Estado de Excepción que dictó el Ejecutivo", indicó el jefe de policía, Sixto Ramírez. Posteriormente el ministro del Interior, Víctor Hermosa explicó que agentes policiales procederán a la búsqueda y detención de los cabecillas de las manifestaciones y movilizaciones de oviedistas en todo el país, principalmente, en las zonas de Caaguazú y Alto Paraná, a 200 y 390 kilómetros al este de Asunción, respectivamente. "Tenemos identificados a los operadores oviedistas del movimiento Unión Nacional de Ciudadanos Eticos que estuvieron en las manifestaciones", comentó Hermosa. Unace es una agrupación formada el año último en Brasil por Oviedo pero sin reconocimiento de la Justicia Electoral en Paraguay como para realizar actividades propias de un partido político. * Brasil pide explicaciones. El ministro de Justicia brasileño, Paulo de Tarso Ribeiro, ordenó ayer la convocatoria inmediata de Lino Oviedo, para que confirme o desmienta las denuncias según las cuales habría comandado la ola de protestas que sacudió a Paraguay. Ribeiro destacó que Oviedo -cuya extradición a Paraguay fue denegada por el Supremo Tribunal Federal- ha sido autorizado a permanecer en territorio brasileño, pero sólo si se mantiene alejado de actividades políticas. El ministro pidió además a la Policía Federal un informe detallado sobre el bloqueo del Puente de la Amistad, en la frontera entre Brasil y Paraguay. (Reuters, DPA y AFP)
| |