Una escuela del barrio 7 de Septiembre sufrió graves destrozos en la madrugada de ayer, cuando un grupo de delincuentes ingresó al establecimiento y tras robar dos radiograbadores causó daños en dos aulas y destruyó la totalidad del material didáctico y de la documentación de los alumnos. El incidente fue el segundo de ese tipo en poco más de un mes, cuando personas todavía no identificadas sustrajeron mercadería y utensilios de cocina del comedor del colegio.
El violento episodio ocurrió en la escuela Fray Luis Beltrán, ubicada en Ayala Gauna al 7800, a media cuadra de la subcomisaría 21ª. El sector afectado fue el de los alumnos de séptimo año, en la planta alta de la escuela. El lugar está compuesto por tres salones conectados entre sí por un palier, a los cuales asisten unos 180 chicos. Pero en total asisten 1.400 alumnos en ambos turnos de EGB. Los vándalos ingresaron a la escuela presumiblemente desde la parte trasera, treparon por un alambrado y después se introdujeron por la ventanas de una de las aulas.
Todo a su disposición
Después, y con la utilización de una barreta, forzaron una de las puertas y a partir de allí tuvieron los tres salones a su disposición. Cuando el personal de mantenimiento y limpieza llegó ayer a la mañana para abrir la escuela se encontró con la desagradable sorpresa. Armarios rotos, papeles, útiles, calculadoras que los alumnos usan en sus clases, libretas de calificaciones, discos compactos, videos, fascículos de enciclopedia, entre otros elementos didácticos, quedaron desparramados por el piso en estado deplorable.
Un cuestión que llamó la atención de las autoridades y de los docentes fue la destrucción casi total de las libretas de calificaciones de los chicos y el ensañamiento que tuvieron con el resto del material de uso de los alumnos. Los desmanes al parecer tuvieron como único objetivo el robo de dos radiograbadores.
La misma escuela sufrió hace un mes y medio un importante robo en el sector del comedor. En esa oportunidad, los ladrones se llevaron mercadería en general y utensilios de cocina como, por ejemplo un juego completo de cuchillas. Según dijeron a La Capital padres de los alumnos esos objetos eran ofrecidos a la venta casa por casa sin que la policía pudiera detectar a quienes lo vendían.
La Escuela Fray Luis Beltrán contaba con un sistema de alarma que hace unos meses fue levantado por la empresa que lo proveía debido a una abultada deuda por falta de pago. Desde ese momento, el edificio comenzó a sentir los embates de la inseguridad y por tal motivo ahora aseguran desde el establecimiento que "se hará un tremendo esfuerzo para saldar esa deuda y no dejar sin alarma a la escuela".