Año CXXXV
 Nº 49.537
Rosario,
sábado  13 de
julio de 2002
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Desvinculan a una pareja de un violento robo
La víctima fue la dueña de una pensión de Sarmiento y Gálvez. Sospechan de un custodio privado

Dos de los acusados por el brutal robo a la dueña de una pensión de Sarmiento y Gálvez recuperaron ayer su libertad al no haberse comprobado que tuvieran relación con el episodio, por lo que obtuvieron la falta de mérito en la causa.
Jorge Alvarez y Soledad Espinoza quedaron en libertad en el mediodía de ayer por orden del juez Alfredo Ivaldi Artacho, a cargo de la investigación por el violento robo que sufrió Ana Emilia Ceriani, una enfermera retirada de 70 años. El magistrado no resolvió aún la situación del tercer implicado, Eduardo Toledo, quien a diferencia de la pareja mencionada aparecería comprometido en el hecho y continúa detenido.
Toledo era el novio de la mujer y vivía en el lugar. Según trascendió, la relación "andaba más bien a los tumbos".
El episodio ocurrió el pasado 11 de junio. Ceriani fue drogada con un psicofármaco, maniatada de pies y manos, golpeada y finalmente despojada de 4 mil pesos. La mujer todavía se encuentra internada, y aún no pudo declarar ante la Justicia.
Alvarez y Espinoza estuvieron dos meses en la pensión y se mudaron el mismo día del robo. "Fueron involucrados en la causa por Toledo, quien dejó entrever ante la policía que podían ser los autores del hecho. Más allá de esa declaración no se obtuvo nada contra ellos", dijo el abogado Rodrigo Guidi, defensor de la pareja.
La pareja "no tenía nada que ver con Toledo, a quien simplemente conocían por cruzar de vez en cuando en la pensión", agregó Guidi.
Toledo trabajaba como vigilador privado y, según trascendió, se hallaba medicado por indicación psiquiátrica. Los investigadores sospechan que Ceriani fue drogada con comprimidos de Trapax que él tenía recetados.


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