Atilio Pravisani / La Capital
El presidente de la Cámara baja provincial, Alberto Hammerly (PJ), aseguró ayer que no hubo ninguna señal del gobernador Carlos Reutemann sobre un cambio en el mensaje enviado a la Legislatura para reformar la Constitución santafesina, aunque admitió que puede haber alguna apertura a partir del diálogo con todos los sectores. Y aclaró que la aprobación de la iniciativa también depende del Senado y de la oposición en Diputados. "Los diputados del PJ están dispuestos a votar la reforma tal cual la planteó Reutemann, pero esto no depende exclusivamente de nosotros. En primera instancia lo debe resolver el Senado y, posteriormente, se necesita el acompañamiento de la oposición en la Cámara baja para poner en funcionamiento la Constituyente", explicó Hammerly a La Capital . El legislador afirmó que Reutemann no dio ninguna señal que suponga que piense distinto a una semana de haber enviado el mensaje. "Nuestra posición sigue siendo la misma, aunque estamos de acuerdo en que el tema amerita lograr el mayor consenso", aclaró. Por algunos pasillos de la Casa Gris se conjeturó que, de haber sido otra la definición del Lole respecto a su candidatura presidencial, el proyecto contaría con media sanción del Senado y que ahora, frente al renunciamiento del gobernador, muchos legisladores lo pensarían dos veces antes de votar el adelantamiento de la caducidad de mandatos. De todos modos, el Senado decidió enviar el mensaje del Ejecutivo y, al mismo tiempo, iniciar una ronda de conversaciones con intendentes y presidentes comunales. Luego habrá una reunión con Reutemann para plantear dudas o la posibilidad de modificaciones o de alguna apertura. Frente a la posición radical de apoyar la convocatoria sólo si se da lugar a una reforma más profunda, Hammerly dijo que "todo se debe conversar y se puede discutir". En ese sentido, agregó que hay situaciones que el bloque comparte, como extender el mandato de los presidentes comunales de dos a cuatro años, "pero siempre pensamos en una reforma lo más acotada posible para resolverlo con rapidez". Hay un dato a tener en cuenta: aunque el Senado apruebe la reforma, el oficialismo en Diputados no podrá convertirla en ley si carece del apoyo de los radicales de Convergencia. El PJ necesita los dos tercios de los votos del cuerpo. El tema ofrece distintos matices para los sectores políticos que integran la Cámara. Es el caso del PSP, que pretende una reforma más profunda y carece de ganas de votar el proyecto oficial. Pero, al mismo tiempo, se tiene en cuenta que Elisa Carrió (ARI) y otros sectores afines enarbolan la bandera del "que se vayan todos".
| Hammerly: "El tema amerita lograr el mayor consenso". | | Ampliar Foto | | |
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