Dos buenas noticias recibieron ayer los hinchas de Boca Juniors: el defensor Diego Crosa finalmente seguirá en el club y el ex delantero de San Lorenzo Raúl Pipa Estévez se realizó la revisión médica y hoy se entrenará por primera vez con sus nuevos compañeros.
Crosa, quien estuvo a punto de pasar a Monterrey de México, se quedará en Boca luego de que los dirigentes llegaran a un acuerdo con sus pares de Betis de España para comprar la totalidad de su pase en 1.350.000 dólares.
Boca, en definitiva, pagará por Crosa la misma cifra que Monterrey le ofrecía al Betis. El defensor, de buen rendimiento cada vez que le tocó jugar con la camiseta xeneize, acordó un contrato por dos años y cobrará una parte del mismo en dólares.
Larga y cambiante como pocas, la negociación llegó a un final feliz para Boca porque Betis accedió a un expreso pedido del defensor de permanecer en el país.
Claro que también resultaron vitales las negociaciones que Alfredo Tanque Rojas y el gerente Eduardo Cafaro llevaron adelante en España con el presidente y el secretario técnico de Betis, Manuel Ruiz de Lopera y Luis Del Sol, respectivamente.
Por otra parte, el Pipa Estévez concurrió ayer por la mañana a la Bombonera y, luego de conversar con el entrenador Oscar Tabárez, se sometió a la revisión médica con Jorge Batista, el médico del plantel.
La sorpresiva llegada de Estévez se debe a la lesión sufrida por Guillermo Barros Schelotto, quien recién podrá volver a jugar en unos tres meses, y a la posible ida de Marcelo Delgado, cuya relación tanto con los directivos como con Tabárez dista de ser la mejor.
El club de la ribera pagará 1,4 millón de dólares por el pase del delantero, quien había quedado libre de San Lorenzo.
Se despidió Riquelme
En un día con sorpresas de las buenas, el volante ofensivo Juan Román Riquelme, flamante refuerzo del Barcelona de España, pasó por el predio de Casa Amarilla para saludar a sus ex compañeros, retirar sus pertenencias y compartir un asado con el grupo.
Acompañado por algunos amigos, Riquelme lució de muy buen humor e intercambió muchas bromas con sus ex compañeros y los utileros del club.
En tanto, el lateral derecho José María Calvo pasaría en las próximas horas al Feyenoord de Holanda, último campeón de la Copa Uefa.
A su vez, el viernes llegaría al país para someterse a una prueba el delantero húngaro Robert Wagner, quien juega en el seleccionado de su país, tiene 24 años y mide 1,84. (DyN)
La Ciudad
