En Newell's había cara de satisfacción. La llegada de un refuerzo parece haber llenado de tranquilidad al cuerpo técnico, que desde el final del Clausura comenzó a pedir a viva voz un jugador, sobre todo un defensor que ocupara el lateral izquierdo. La idea era tenerlo al inicio de la pretemporada, pero eso no fue posible por la falta de dinero debido a la traba que había en el pase de Maxi Rodríguez a Espanyol. Solucionado ese tema, la dirigencia rojinegra cumplió con el pedido y contrató al brasileño Paulo César. "El presidente (Eduardo López) me sorprendió cuando me llamó anoche (el lunes) para citarme en un hotel donde estaba el jugador. Eso es algo que me puso contento y con la llegada de este refuerzo estamos hechos", confesó el Negro Zamora. "Es un futbolista -agregó- con muy buena técnica que jugó mucho tiempo en equipos de primera división. Hablé con (Ricardo) Rocha y me dio las mejores recomendaciones", añadió el entrenador, que desde un primer momento dijo tener muchos recaudos a la hora de traer un refuerzo, ya que no quería equivocarse en la elección, como sucedió en etapas anteriores con distintos nombres que pasaron sin dejar nada. "Jugó en equipos importantes. Esperemos que sea una solución para nosotros, técnicamente se lo ve muy bien. Tiene que entrar en ritmo y hacer las cosas de la mejor manera", expresó el Negro, quien reiteró que con el brasileño "cubro el lateral izquierdo" que tanto lo preocupaba.
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