El mismo día en que el presidente Eduardo Duhalde anunció el llamado a elecciones anticipadas, el Fondo Monetario Internacional (FMI) admitió públicamente que el acuerdo crediticio con Argentina podría cerrarse a fines de julio.
El vocero del organismo, Thomas Dawson, afirmó desde Washington que las negociaciones con el gobierno tomaron "un nuevo impulso", por lo cual "hay esperanzas de que el acuerdo será alcanzado lo más rápido posible".
"El progreso no ha sido, claramente, tan rápido como habíamos previsto y esperado, pero creo que ahora tenemos un nuevo impulso con las autoridades y estamos avanzando", dijo Dawson, quien agregó: "Estamos entrando en un período de mucha actividad y tenemos esperanzas de que el acuerdo será alcanzado lo más rápido posible, no hay escasez de recursos que están siendo dedicados a esto".
El vocero del FMI aseguró que las negociaciones de la semana pasada con el ministro de Economía, Roberto Lavagna, "generaron avances" y anticipó que la semana próxima llegará el primer equipo de economistas del Fondo que monitoreará el programa económico. "Nosotros esperamos una cantidad de misiones que estarán allí en una base más o menos continua a lo largo de las próximas semanas", aclaró Dawson.
El vocero señaló que los economistas del organismo se concentrarán en cuatro áreas principales: el desarrollo de una política monetaria sólida, la estabilización del sistema bancario, la independencia del Banco Central y la mejora en la política fiscal del gobierno central y las provincias.
También se refirió a la comisión de notables que intervendrá en el armado del plan monetario argentino, al confirmar que un grupo de expertos ofrecerá consejos a "ambas partes" sobre la elaboración de "una nueva política monetaria".
El jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, afirmó ayer que el gobierno entró en "una negociación activa" con el Fondo, tras considerar positivas las últimas declaraciones del organismo y del Tesoro norteamericano respecto de que existen "avances" en las conversaciones.
El anuncio del Fondo sobre la probabilidad de llegar a un acuerdo a fines de julio mejoró el clima en el mercado cambiario. El dólar operó en baja ayer en la city porteña.
El BID no perdona
Pero no todo es alegría. El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) rechazó la posibilidad de postergar el pago de 700 millones de dólares que vencen este mes. El ministro Lavagna, que ayer presentó el pedido formal al organismo, había dado por descontado este perdón luego de su viaje a Washington.
Una funcionaria del organismo que conduce Enrique Iglesias explicó que el estatuto de esa institución no permite postergaciones ni renegociaciones de los préstamos concedidos por esa entidad.
El gobierno consiguió el fin de semana la promesa del Fondo de que reprogramará un pago de más de 900 millones de dólares que debía efectuar a mediados de julio. Y esperaba lograr el mismo tratamiento por parte del BID y el Banco Mundial.
Dawson dijo que el FMI tomará en cuenta la solicitud de Argentina de reprogramar el pago y resaltó que una extensión de un año era permitido bajo los reglamentos del préstamo del Fondo.
Pero el BID no se mostró tan permisivo. "Lo que puedo confirmar es que el BID y el Banco Mundial no pueden hacer lo que hizo el FMI", dijo la funcionaria del organismo.
Un vocero del Palacio de Hacienda relativizó la negativa de esa entidad, al señalar que "seguramente se encontrará un mecanismo" para postergar el pago. En todo caso, ratificó que el gobierno no usará las reservas para cancelar los vencimientos.
El BID era el único de los organismos internacionales de crédito que hasta ahora se había mostrado dispuesto a ayudar a Argentina antes de que el país cumpla con una serie de metas fiscales y de reformas legislativas que le exigen el FMI y el Banco Mundial.
En mayo, el BID otorgó a la Argentina el primer préstamo que el país recibió desde su incumplimiento de pagos, por un monto total de 694 millones de dólares, destinado a la lucha contra la pobreza.