Al igual que los que quedaron atrapados en el corralito financiero, los clientes que pusieron sus ahorros al cuidado de una aseguradora de vida o retiro, o que cobran sus rentas vitalicias a través de alguna empresa del sector, sufrieron el golpe de la salida de la convertibilidad. De un día para el otro se encontraron con que sus pólizas pactadas en dólares habían perdido valor y por más que patalearon y reclamaron, a la mayoría se les pagó en pesos con una explicación cerrada: "Las aseguradoras no podemos hacer nada si el gobierno toma la decisión de pesificar por decreto".
Mercedes tenía pactada una pensión en dólares y desde febrero cobra su renta mensual a la conversión 1,40 peso por dólar. Como si fuera poco, esta señora apostó a un seguro de vida en la misma empresa en la que tenía adjudicada la renta dejada por su marido al morir. Ante la desconfianza que le despertó el hecho de que le pesificaran la renta vitalicia decidió retirar su póliza de vida en forma anticipada: "Pensé que por ahí cierran de un día para el otro y no puedo recuperar nada de nada, entonces fui y rescaté la póliza", comenta.
A Mercedes le pagaron el monto correspondiente a 1,40 peso por dólar y con un cheque, "con lo que encima me quedó todo en el corralito, puedo retirar 300 por semana", se queja.
Mercedes dice que está "agotada" de reclamar y que la respuesta sea siempre la misma: "No me reconocen que invirtieron mal mi dinero, le echan la culpa al gobierno pero no les creo nada. Con esto se llevaron las ilusiones de una vida segura para cuando sea viejita", se lamenta.
Similar es la situación de Graciela, que también es poseedora de una renta vitalicia desde el año 1999. "Mi contrato está pactado en dólares pero me pagan a 1,40. Elegí la empresa que elegí porque me daban respaldo internacional, aposté mi dinero a la tranquilidad y me llevé una desagradable sorpresa", relata.
Graciela está al frente de una comisión que intenta juntar voluntades de personas con el mismo problema para encontrar por vía judicial y el reclamo una solución que no los perjudique. "Vamos y venimos desde comienzo de año, estuvimos con los diputados nacionales que pertenecen a la comisión de asuntos previsionales pero lamentablemente no nos escuchan".
Graciela hizo además una denuncia en la Secretaría de Comercio Interior. Consiguió que un abogada mediara por ella con la empresa en la que tiene su renta. Hasta el momento no hay novedades favorables: "Ellos dicen que están atados de pies y manos pero yo voy a seguir hasta las últimas consecuencias", enfatiza.
El derecho de los consumidores
Desde Adecua, asociación que defiende los derechos del consumidor, están motorizando distintos pedidos para que se revean estos casos.
Como mínimo, les sugieren a los perjudicados que van recibiendo mensualmente el dinero pesificado de sus rentas que firmen "bajo protesto y reservando derecho", en vista de futuros juicios.
Hace unos días, un matrimonio rosarino se atrincheró en las oficinas de una aseguradora ante la negativa de la empresa de reintegrarles el dinero de un seguro de vida que pretendían rescatar. Con la movida que armaron consiguieron que les paguen. Eso sí, a 1,40 y con una quita importante. El monto percibido no superó los mil pesos después de varios años de aportes.