Mick Jagger, el chico malo del rock and roll británico, tras cuatro décadas en el mundo del espectáculo y a los 60 años de edad, fue nombrado caballero del Imperio Británico por la reina Isabel II ayer, hecho que significa para el músico el reconocimiento definitivo de un sistema que denigró toda su vida. Se trata de un honor tan inesperado como polémico para el hombre que durante toda la epopeya de los Rolling Stones encarnó la célebre trilogía "sexo, droga y rock and roll", antes de convertirse más tarde en un temible hombre de negocios, amante infiel y padre severo.
Jagger había tenido que aceptar que, antes que él, Paul McCartney, Elton John, Cliff Richard y otros fueran invitados al palacio de Buckingham para que, en la histórica ceremonia de ser tocados en el hombro con una espada por la reina, fueran convertidos en caballeros.
Si bien en 1977 declaró que "junto con la reina, soy uno de los mejores productos de Gran Bretaña", ayer, tras cuatro matrimonios, siete hijos y ya como abuelo, el veterano del rock se tomó el nombramiento con humildad: "Estoy muy feliz. Es un honor".
Pero que el "abuelo del rock británico" sea un Sir está creando polémica.
Algunos señalan que el "evasor de impuestos" Jagger, al contrario que Bob Geldof, Sting o Bono, nunca ha hecho algo por motivos caritativos.
No lo ven como modelo
La prensa coincide en sostener que el consumo de drogas, el orinar en plena calle, sus provocadores textos y, sobre todo, su loca y salvaje vida privada no lo convierten en un modelo a seguir y, mucho menos, lo hacen merecedor de recibir tal honor.
Sin embargo, el diario Independent considera que Jagger ha sido fiel a sí mismo y que en las críticas por su nombramiento como Sir subyace una cierta hipocresía.
"Durante más de 40 años, Jagger ha sido un valioso artículo de exportación británico, y en ocasiones ha tenido más éxito que British Airways o Rolls Royce", afirma el diario.
El músico nació el 26 de julio de 1943 en Dartford (Kent) en una familia de clase media. En 1961 ingresó a la prestigiosa London School of Economics, pero la economía lo aburría y prefirió el rhythm'n blues de Chuck Berry.
Con su amigo de infancia Keith Richard, al que se sumaron luego Bill Wyman y Charlie Watts, formó el grupo que luego sería conocido en el mundo entero: los Rolling S tones.
Su primer 45 salió en 1963. Un año más tarde se incorporó el guitarrista Brian Jones. En 1965 el álbum "Satisfaction" los catapultó a la gloria y desde entonces se inclinó hacia una vida de excesos y provocaciones que forjaron la leyenda de los chicos malos del rock inglés.
Su vida sentimental ocupa regularmente los titulares de la prensa. Tuvo siete hijos con cuatro mujeres diferentes: la cantante Marsha Hunt, las modelos Bianca Pérez Morena, Jerry Hall y Luciana Morad. Aún hoy sale con bellísimas mujeres que en general tienen unos 30 años menos.
"A los 60 años prueba finalmente que el hecho de envejecer mal no es un obstáculo para los honores", señaló maliciosamente The Times.
Sin embargo, estos honores le fueron otorgados "por servicios a la música", y sólo a la música. "It's only rock and roll", como dirían los Stones.
El portavoz del primer ministro Tony Blair declaró que Mick Jagger era "una de las grandes estrellas del siglo pasado" antes de añadir, consciente de su metedura de pata, "que sigue dando muchas alegrías" a sus fans.(Télam y AFP)