El gobierno nacional se sumó a las expresiones de repudio y preocupación de distintos sectores sociales por la brutal agresión que sufrió un alumno del colegio secundario porteño Mariano Moreno, a quien dos desconocidos le marcaron en el pecho con un elemento cortante tres A, en un remedo de la criminal Alianza Anticomunista Argentina (AAA) que actuó antes y tal vez durante la pasada dictadura militar.
La víctima, un chico de 17 años cuya identidad se mantiene en reserva, atacada el martes pasado cerca de su casa, participaba en la lucha del centro de estudiantes del colegio por lograr un boleto estudiantil de 5 centavos, hecho que trajo a la memoria la trágica Noche de los Lápices de la década del 70, cuando varios chicos que también pedían la misma reivindicación fueron secuestrados, torturados y asesinados.
Por las características de la agresión, en la que quedó en evidencia que los atacantes conocían los movimientos del alumno así como el de algunos de sus compañeros, y hasta probablemente tenían intervenido el teléfono de su casa, los familiares del alumno sospechan de la participación de grupos parapoliciales, por lo cual optaron por denunciar el hecho directamente a la Justicia, sin pasar por la rutinaria denuncia en sede policial.
Atanasof se ocupó del tema
Ayer expresaron su repudio al hecho tanto el jefe del Gabinete, Alfredo Atanasof, quien aseguró que el tema "es un dato que verdaderamente preocupa al gobierno, como a todos los argentinos", y el jefe de gobierno porteño, Aníbal Ibarra, quien admitió que el ataque no obedeció a un robo. Dijo que todavía no hay información de los responsables del hecho.
Ibarra puso de relieve la reacción generalizada de todos los sectores relacionados con la cultura, la educación y los derechos humanos "para decir no vamos a permitir que se instale la violencia o hechos de agresión física vinculados con una actividad política o una actividad estudiantil", aseveró.
Por su parte, el secretario de Educación porteño, Daniel Filmus, consideró que "el país no está para este tipo de situaciones ni tampoco amerita tener militancia en un centro de estudiantes ningún tipo de reparos en la democracia".
Filmus reiteró que el gobierno porteño mantuvo reuniones con los estudiantes, con los profesores, con los padres del chico y con el propio chico y "lo asesoramos y lo acompañamos a hacer la denuncia judicial".
Atanasof anunció que trabajarán en la investigación del hecho "las áreas competentes, particularmente la Secretaría de Justicia".
Por su parte, la directora de Derechos Humanos de la Ciudad de Buenos Aires, Gabriela Alegre, quien anteayer a la mañana acompañó al joven de 17 años (de quien se mantiene en reserva su identidad) y a sus padres, a efectuar la denuncia judicial, advirtió que "los padres están atemorizados porque pareciera que los teléfonos (de su casa) estuvieran intervenidos" y señaló "esto no se puede creer y es muy indignante que se metan nuevamente con los chicos".
Sin embargo, la funcionaria afirmó que no hubo otros casos de intimidaciones a alumnos ni profesores en el Mariano Moreno ni en otros colegios secundarios de la Capital, aunque el hecho fue considerado como "un ataque al colegio y a todo el movimiento estudiantil".
Un acto en Almagro
Si bien la agresión se produjo el martes por la noche, la denuncia fue realizada anteayer a la mañana por el centro de estudiantes del colegio y los padres del menor, acompañados por padres y profesores del colegio que ayer, junto con organizaciones de derechos humanos, concretaron un acto de repudio en el colegio ubicado en la esquina de Rivadavia y Maza, en el barrio de Almagro.
También expresaron su repudio la Secretaría de Educación, la Dirección de Derechos Humanos, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad y la Asociación Madres de Plaza de Mayo, mientras que ayer se presentó personalmente en el colegio, el propio jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra.
Además, el único sobreviviente de la Noche de los Lápices, Pablo Díaz, opinó que "a veces hay que actuar preventivamente", y consideró que casos como éste no tiene que ser denunciado por "la gente común sino por el Estado, a través de sus organismos" competentes.
Según los testimonios que figuran en la denuncia judicial, "los agresores, vestidos con camperas de cuero oscuras que le tapaban parte del rostro y con anteojos negros", luego de grabarle las tres A en el pecho y lastimarle varias partes del cuerpo, le profirieron todo tipo de insultos aludiendo a la participación del joven en el centro de estudiantes y las reivindicaciones que llevan adelante con relación al boleto estudiantil. (DyN)