El proceso de reestructuración del Banco Bisel tras el abandono de los franceses del Credit Agricole se puso en marcha en el marco de una fuerte presión de los sectores productivos locales para darle un contenido regional a la futura integración de la entidad financiera. Para concretarlo, seguramente deberá aparecer alguna intención de capitalización y una decisión de parte de las autoridades designadas por el Nación de darle cabida a una opción de estas características. Por cierto, el estado de movilización que se generó durante la corrida para evitar una suspensión es un buen punto de partida para avanzar en esa dirección. Y también dependerá de la actitud de la gestión para recomponer la relación con los usuarios: "Un banco regional en serio no puede hacerse el distraído y descuidar a sus clientes genuinos", enfatizó en off de record un fuerte industrial de la zona, que recordaba como el año pasado se amputaban de la noche a la mañana los descubiertos y se negaba operatorias a firmas de peso, en los días previos al denominado Casildazo.
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