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Zapatos rotos

Cuando el dibujante y editor Stein publicó en Buenos Aires a mediados del siglo XIX su periódico satírico "El Mosquito" no ahorró ingenio caricaturesco para retratar a los personajes de la época. Mitre, Sarmiento, Avellaneda, Roca, Alsina y muchos otros cayeron bajo la exagerada pluma satírica del suizo quien burlándose así de los popes de nuestro país pasó a la historia junto con su publicación periódica. Cuenta la anécdota que habiendo pasado ya tres o cuatro números en los que Sarmiento no aparecía con sus grandes orejas o con su cuota de yoísmo al frente, se encontró de sopetón en plena calle Florida con Stein, quien al verlo palideció. Entonces Sarmiento, con su voz tonante le preguntó: "¿Qué pasa Stein que ya van varios números del Mosquito en que no se habla de mí?" "Es que...", balbuceó Stein. "Vea amigo -lo cortó Sarmiento casi tomándolo de las solapas- Usted hable de mí, mal o bien, pero hable!". Esto viene a cuento acerca de un personaje rosarino que es senador nacional y se llama Horacio Usandizaga. El popular "Zapatos rotos" parece ser abonado a los escándalos que le permiten ocupar las planas de los diarios. La última vez fue en el Consejo de la Magistratura mientras se debatía el ascenso de los jueces. Los ahorristas allí reunidos respaldaron a un magistrado que los había favorecido y el estudiadamente irascible vasco los increpó recibiendo una catarata de insultos. Todo sea por la imagen pública. El hombrecito busca que se hable aunque sea mal de él, y lo notable es que siempre lo consigue.
Elisa Bello