"Estamos encarando un estudio pormenorizado de lo que se gasta en los restantes poderes del estado provincial: cantidad de asesores, parque automotor, manejo autárquico de partidas y gastos reservados, relacionándolo todo con la productividad. Queremos conocer cuántos programas de gobierno se han planeado y ejecutado, cuántos días han sesionado las cámaras legislativas, cuántas leyes han sancionado, y compararlo con las sentencias y autos que han dictado los jueces de esta provincia. Así la comunidad tendrá elementos serios que le permitirán discernir si lo que realmente prefiere es una burocracia eficiente, profesional, con capacitación continua, que le resuelva sus problemas cotidianos o funcionarios que ganen poco, que no se capaciten -porque milagros en la Argentina de hoy no existen- y que lleguen al poder con una expectativa de hacer buenos negocios".
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La Ciudad
