La aplicación de un acuerdo para resolver el conflicto en la basílica de la Natividad de Belén se retrasó ayer a raíz de la decisión de Israel de aumentar el número de palestinos que debían viajar como exiliados a Italia, informaron fuentes diplomáticas. Pero el vocero del ejército israelí, teniente coronel Olivier Rafowicz, expresó en la cisjordana ciudad de Belén que "la aplicación del acuerdo se demoró porque ningún país está dispuesto a aceptar a los terroristas palestinos". Unos doscientos palestinos, entre ellos unos 30 milicianos, se encuentran refugiados en la basílica, bajo asedio del ejército israelí, desde el pasado 2 de abril. El subsecretario de Relaciones Exteriores italiano, Alfredo Mantica, explicó que para recibir a trece palestinos es necesario aclarar el estatus jurídico de los mismos y su "grado de peligrosidad". Por otra parte, precisó que una eventual aceptación de los palestinos deberá ser discutida primero con la Unión Europea y Estados Unidos. El acuerdo alcanzado el lunes prevé la expulsión a Italia de 13 hombres, que se encuentran entre los más buscados por los servicios de seguridad israelíes. Pero fuentes diplomáticas explicaron que la decisión israelí de aumentar el número de los palestinos refugiados en la basílica que debían viajar a Italia impidió que la crisis quedara solucionada. Los informantes dijeron que, en un principio, Italia estaba dispuesta a acoger a cuatro o cinco palestinos. Pero señalaron que el aumento del número de hombres requeridos por Israel, y la falta de claridad en cuanto a su condición, prisioneros u hombres libres, impulsó a Italia a rechazar su propuesta inicial.
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La Ciudad
